Una primera rueda previsible
El pato da la nota
La Liga Uruguaya llegó al cierre de su primera rueda sin grandes sorpresas en lo deportivo y con situaciones a corregir fuera de la cancha. Es que Malvín, Hebraica, Unión Atlética y Aguada están arriba como uno esperaba, con algunos altibajos en su juego y sin mostrar todo lo que tienen para dar. En esa zona está Biguá como gran revelación y Trouville que ha cambiado y mucho desde la llegada del español Mateo Rubio. En el otro polo y muy complicados con el descenso se encuentran Cordón, Nacional y Larre Borges quienes deben hacer una segunda rueda sin errores si es que pretenden mantener la categoría. En el medio uno encuentra de todo, con Tabaré como nota saliente dando más de lo que uno esperaba y Bohemios que está por debajo de las aspiraciones previas.
Con los pibes, vuela alto
A la hora de hacer un análisis de la primera ronda y encontrar el punto más positivo, uno encuentra el gran torneo que está haciendo Biguá. Sólo con jugadores formados en la institución, con la responsabilidad que le entregaron a Cambón, Vidal, Meira y Loriente de ser figuras y un gran conocimiento de Álvaro Tito del plantel que tiene a su cargo, el “pato” juega al basquetbol, en lo que parece una frase sin sentido pero que refleja a las claras lo que uno siento cuando ve un partido de Biguá. Es que se potenció con dos extranjeros que conocían el medio como Jeffries y Jhonson y a su vez encontró en Nathan, Brause y Álvarez jugadores que saben adaptarse a situaciones complejas y puntuales. Biguá parece darse cuenta que para llegar a la final hay que desbancar en esta etapa a Malvín o Hebraica del “1-2” y por ahora lo está consiguiendo.
Están regulando
Tanto Malvín, que sólo perdió el clásico ante Unión Atlética, como Hebraica; dan la sensación de regular el torneo. Si bien el “playero” ha ganado casi todos sus partidos, no ha mostrado un gran caudal en su juego. El “macabeo” tiene un solo extranjero, no encuentra el compañero de Hatila Passos y como si fuera poco ya está en el tercer escalón en la tabla.
De todas maneras estos dos equipos ven como con poco les alcanza para estar arriba. Ni Unión Atlética, ni Aguada, rivales que a priori salían a desbancarlos, han podido encontrar una regularidad en su juego que los haga verse como reales enemigos. La “UA” ganó el clásico y marcó la cancha en ese sentido, pero venía de perder ante Biguá y Hebraica. El aguatero por su parte está en un momento complicado por lesiones y extranjeros que no terminan de conformar, relegando posiciones en la tabla y no encontrando hasta el momento una mística ganadora que resulta clave para la definición.
En la zona alta y entre los equipos que se despegaron del resto se encuentra Trouville, que luego de un proceso de adaptación lógico a lo que pretendía el español Mateo Rubio, encontró el rumbo y lo confirmó con el gran triunfo ante Hebraica, más allá que le falta estabilizarse si es que pretende llegar a semifinales.
También está Defensor Sporting que hasta el momento no ha confirmado todo lo que se espera, pero que a la larga uno lo ve más en la definición que sufriendo en otra zona de la tabla. Dando más de lo que uno esperaba está Tabaré que ya con lo realizado en estos primeros partidos parece que le da para alcanzar el primer objetivo que era la permanencia y hasta animarse a un poco más, ya que está en zona de clasificación y le ha ganado a todos los rivales directos. Creciendo también viene Olimpia, que desde la llegada de Elliot y Hunt es otro equipo y ha potenciado a sus jugadores nacionales. Silveira es el caso más notorio, pero también encentra a Galeano y Trasante en un nivel interesante.
De todas formas el concepto que manejamos al inicio del torneo lo seguimos afirmando, para desbancar a Hebraica y Malvín de la final, el camino más “sencillo” parece ser por las posiciones finales de a fase regular y hasta el momento a no ser Biguá, parece que nadie se terminó de dar cuenta.
Están complicados
En la parte baja de la tabla aparecen complicados con el descenso Cordón, Nacional y Larre Borges. Los 3 equipos ya cambiaron extranjeros y entrenadores; en el caso del “albiceleste” fueron 2 los “cortes” en el banco. Haciendo una proyección de lo que puede pasar, necesitan una segunda rueda notoriamente superior a la primera, donde deberán ganar entre 6 y 7 partidos (de los 15 que juegan) para mantener viva la ilusión de seguir en la Liga. No sólo alcanzará con el nivel de los extranjeros, sino que los nacionales en los 3 equipos deberán levantar lo que mostraron en estos 15 partidos.
Los rivales a alcanzar por ahora son Bohemios, Montevideo Welcome y Sayago. Claro que estos 4 equipos han mostrado otra solidez y han crecido en los últimos partidos. A su vez Bohemios y Montevideo están por debajo de lo que uno espera, con imponderables como el permanente recambio de extranjeros en el primero y la lesión de Haller en el segundo. Si hay que hacer un análisis previo, veo a esos dos equipos definiendo para ingresar en la post temporada y no con problemas de descenso. A su vez Sayago y Welcome son equipos “bichos” para este tipo de circunstancias y en el caso de los de Ariel y la vía hay que agregar que a partir de diciembre contarán con Terrie Monroe como ficha nacional y es un plus que ninguno de los otros equipos tienen.