Una pelota para cada niño
El "Grillo" Gustavo Biscayzacú contó, en exclusiva con Tenfield, cómo se desarrolló el reparto de pelotas para niños en esta navidad, desde la fundación caritativa de la que es parte.
Gustavo Biscayzacú, embajador de la fundación caritativa de origen chilena, llamada "Cambia tu calle".
La navidad es un momento especial en todo el mundo, donde la alegría, la comunión y el amor de la familia resplandece. Pero, sobre todo, es una fecha con un sabor especial para los niños, quienes se llenan de ilusión y esbozan sonrisas gigantes con los regalos que reciben de Papá Noel.
En Uruguay, quien se viste desde 2020 como el mítico personaje navideño para muchos niños es Gustavo Biscayzacú. Como embajador de la fundación caritativa de origen chilena, llamada “Cambia tu calle”, el “Grillo”, junto con la colaboración de muchas personas, regala pelotas a los niños y niñas de contextos carenciados de Montevideo y de gran parte de Canelones.
En una entrevista exclusiva con Tenfield, el ex jugador de Defensor Sporting y Nacional contó cómo llegó a la fundación, detalló el desarrollo de la actividad que lleva a cabo en cada navidad y explicó por qué los regalos son pelotas, entre otras cosas.
“Antes del chupete, los niños ya tienen una pelota” expresó Biscayzacú, alegando que “es algo que al uruguayo lo identifica” y que “es algo muy importante durante toda la niñez”, y continuó: “Yo recuerdo la mía, allá en La Unión, donde venía Papá Noel a regalarme una pelota y salíamos a jugar con todo el grupo de amigos. A través de eso uno va formando un montón de valores y enseñanzas que da la calle y los picaditos de barrio. Eso es lo que nosotros tratamos de lograr, así como que los niños salgan de los lugares y de los contextos en los que no deberían estar, y que hagan más deporte”.
Cambia tu calle es una fundación sin fines de lucro que surgió en Chile, en 2020, y cuya misión se extendió por todo el continente. En cada país se encuentran embajadores que se encargan de llevar a cabo la actividad. Pero cuando todo empezó, faltaba alguien en Uruguay.
“Me invitaron a participar en la fundación en este país y enseguida acepté. Les dije que me gustaba la idea y, además, yo no trabajaba en ese momento. Así empezamos, año a año”, contó el Grillo, quien aclaró que la iniciativa solo se lleva a cabo en navidad y sumó datos que reflejan el enorme éxito que ha tenido desde su nacimiento.
“Este es el quinto año consecutivo que vamos creciendo, porque esto inició el primer año (2020) con 440 pelotas y ahora terminamos este año con casi 3800. El crecimiento año a año ha sido muy bueno y la gente confía, colabora y me respalda”, afirmó, y confesó que la cifra alcanzada superó el objetivo propuesto para 2024 por 300 pelotas.
Cabe destacar que el primer año transcurrió en plena pandemia, por lo que se vieron limitados. “Lo hicimos con mucha precaución. No fuimos a muchos lugares y lo hicimos en un solo día. Este año necesitamos tres días seguidos e incluso un cuarto porque seguía habiendo un excedente”, compartió.
Biscayzacú aseguró que “la gente se engancha mucho por el espíritu navideño” y que él mismo se encarga de agradecer a cada uno por su aporte.
Respecto a cómo funciona la recolección y el reparto de las pelotas, el ex futbolista explicó que todo se gesta desde donaciones de la gente: “Este año donaron más de 300 personas, gremios de distintas índoles, empresarios, gente del fútbol. La misma gente es la que compra las pelotas, ya sea de forma particular y nosotros vamos a buscarlas, o depositando el dinero en un lugar donde tenemos una persona que nos deja las pelotas en 280 pesos cada una. Las vamos sumando y cuando llega el día de repartir, vamos a la fábrica y él nos tiene todo listo para arrancar las caravanas a los barrios y repartirlas”, detalló.
Cuando llega el momento de convertirse en el Papá Noel de las pelotas, Biscayzacú lo destaca como su momento favorito, el cual lo llena de emoción.
“Te encontrás con niños que te agradecen o que te dicen ‘¿Enserio es para mí?’, ‘¿lo puedo abrir?’, ‘sos un genio’, ‘te amamos’. También te dan abrazos. Ver la cara de esos niños en los lugares que Papá Noel prácticamente no llega, a nosotros nos hace muy felices”, confesó.
Para los próximos años, entre sus aspiraciones se encuentra poder aumentar el alcance de la iniciativa y llegar a los barrios del interior. Pero para eso, necesitará mayor presupuesto y organización, por lo que hoy se encuentran lejos de lograrlo. “Ya hemos tenido invitaciones desde el interior y ojalá que algún día lo podamos cumplir, porque es algo que me gustaría mucho”, expresó.
XAVIER, SU OTRA ALEGRÍA DE 2024
Además de la felicidad que le trae regalar pelotas a los niños en navidad, Biscayzacú tuvo otro gran motivo para llenarse de “orgullo” en este 2024: su hijo, Xavier.
A sus 19 años, el “Grillito” realizó su debut en Primera División vistiendo la camiseta de Defensor Sporting, al igual que lo hizo su padre. Fue el 18 de agosto, en la derrota del Violeta ante Rampla Juniors por 2 a 1. Pero ese no fue el único momento destacado de su hijo a nivel deportivo. Sobre el final de la temporada, Xavier también fue fundamental en la conquista de la Copa Uruguay. En la semifinal ante Boston River, convirtió un gol agónico (el primero en su carrera profesional) para darle la clasificación a los violetas.
Respecto a lo que sintió al verlo convertir ese gol, Gustavo dijo: “Su primer gol como jugador fue en el arco de la Colombes, tal como yo lo había hecho hace 27 años. Fue un momento de mucha emoción, del alma, de sacar un montón de sentimientos de encima por lo vivido y por todo el esfuerzo y la compañía que le hicimos junto con su madre por su sueño”.
Por otra parte, Xavier también fue convocado a la selección sub-20 de México, donde se consagró campeón del Campeonato sub-20 de Concacaf. Por lo tanto, cuenta con un enorme potencial para seguir creciendo como futbolista y dar de qué hablar el fútbol uruguayo, y eso lo hace sentir un padre orgulloso a Gustavo.
“Tuvo un gran año y nos pone muy felices. Pero esto es año a año, el fútbol es muy difícil, tiene que ir paso a paso y seguir como hasta ahora, con la humildad que lo caracteriza”, indicó el Grillo, quien también se animó a comparar su estilo de juego con el de su hijo.
“Somos muy diferentes. Yo era definidor y de área, él es mediapunta; genera mucho juego, es muy hábil en el uno contra uno, tiene mucha capacidad para sacarse a uno o dos jugadores de encima y tiene esa visión de juego para meterle un pase de gol al nueve o para habilitar muy bien a los extremos. Es muy inteligente para jugar y para moverse, y yo era más definidor, también inteligente para moverme, pero en el área; él está un poquito más atrás”, explicó.
LAS GANAS DE DIRIGIR
Por último, Gustavo manifestó sus ganas de tomar las riendas de un club y trabajar como entrenador.
“No he tenido últimamente la chance de poder dirigir, pero me siento muy preparado, con muchas ganas de estar dentro de una cancha dirigiendo y de hacer una carrera como la de jugador, pero como técnico”, aseguró, y agregó que si bien le gustaría dirigir a un equipo de Primera División, no descartaría la oportunidad de dirigir en categorías juveniles.
Un 2024 lleno de pelotas y alegrías para Gustavo Biscayzacú.
“Este es el quinto año consecutivo que vamos creciendo, porque esto inició el primer año (2020) con 440 pelotas y ahora terminamos este año con casi 3800”, dijo Biscayzacú.
