Polenta, ¿sí o no?
El capitán tricolor, ¿cuelga los botines?
Diego Polenta, realizó declaraciones públicas que explotaron como una bomba, el pasado viernes tras la caída ante Defensor Sporting, en la final de la Copa Uruguay. En las que dejó entrever su posible retiro del fútbol. “Puede que haya sido mi último partido como profesional. Estoy pensando en dejar. Fue un año muy duro. Es difícil cargar con el cajón de un compañero. No es excusa. Me golpeó mucho. Fue el peor año de mi carrera”, expresó en improvisada conferencia de prensa en zona de vestuarios del Estadio Centenario.
¿Cuelga los botines? Fue contundente en sus expresiones, aunque se puede interpretar que las formuló en “caliente”, tras sufrir una dolorosa derrota, con expulsión incluida, en un contexto de decepción y descarga emocional. El repentino, como cruel fallecimiento de Juan Izquierdo, golpeó duro en el plantel tricolor, en especial en su persona.
Lo cierto y real es que durante la presente temporada Nacional tuvo en Diego Polenta, a un capitán de verdad. Un zaguero de comprobada calidad, con una técnica impresionante, pegada espectacular, ganador en la marcación uno a uno ante los delanteros rivales, con indudable voz de mando y capaz de cargar el equipo al hombro y llevarlo adelante.
En el año, disputó 40 partidos oficiales. Sumó 25 triunfos, 11 empates y 4 derrotas. Estuvo en cancha 3.282 minutos, tanto en materia local, como internacional. Convirtió un gol y brindó tres asistencias. Conquistó el Torneo Intermedio y culminó invicto ante el tradicional adversario.
Números que se le pueden considerar positivos, pese a que el equipo no logró el objetivo de reconquistar el Campeonato Uruguayo, que quedó en manos de Peñarol. Pese al mal año colectivo, su rendimiento individual, sin dudas resultó ser de los mejores en filas albas. Junto a Nicolás López, Christian Oliva y Luis Mejía, sobresalen como los mejores exponentes en campo.
Actualmente en período de licencia, disfruta en su chacra de la compañía de familia y de su pasión por los caballos. Con el correr de los días, seguramente las aguas volverán a su cauce, sanarán las heridas y en frío tomará una decisión respecto al futuro de su carrera deportiva.
Su vínculo contractual finaliza el 31 de diciembre. Su representante es quien maneja todo lo referente a su posible renovación o no con los tricolores.
A los 32 años, le resta mucha cuerda y camino por recorrer en el fútbol. Con la camiseta de Nacional, o con la que él mismo elija defender.
Diego Polenta, un capitán de verdad.