Con sabor a poco
Peñarol le ganó 3:1 a Fénix, en el Estadio Campeón del Siglo, por la decimoquinta fecha del Torneo Clausura.
Agustín Alvarez Martínez, con los brazos abiertos a la alegría, en el festejo del primer gol aurinegro.
Peñarol y el consuelo de cerrar con triunfo un año deportivo para el olvido. Mostrando cierto grado de mejoría en lo futbolístico se impuso con comodidad a un liviano Fénix. Fuera de la definición del Campeonato Uruguayo, aguarda por conocer su próximo destino a nivel continental.
Un primer tiempo de neto color aurinegro. Con un aplicado Krisztian Vadocz, un inspirado Walter Gargano, que se convirtió en el abastecedor de balones a Giovanni González y Facundo Torres, que intercambiaron bandas y desequilibraron por las puntas, todo se facilitó para el equipo de Larriera, que mostró un interesante juego colectivo y justificó plenamente la ventaja de dos goles en el tanteador. Conquistas del juvenil Agustín Alvarez Martínez y David Terans, los máximos artilleros de la temporada. La visita, con sentidas ausencias, fue nulo en ataque y recargado de yerros en defensa.
El albivioleta con las variantes de JR Carrasco, mostró un esbozo de reacción en los primeros minutos del complemento, que lo llevaron a ponerse tiro con el gol de Maureen Franco. Fue un espejismo. El dueño de casa, siguió manejando el balón y cuando se lo propuso le bajó la cortina al partido. Golazo de David Terans, zurdazo directo al ángulo superior derecho del arco rival para dejar a las claras su enorme superioridad futbolística en cancha.
Peñarol, con sabor a poco.
