Mazzarino: “Hace 21 días no toco la pelota, nunca me había pasado algo así”
Nicolás Mazzarino, el salteño de 44 años, capitán de Malvín, con títulos de Campeón Federal y de la LUB, es el único Campeón Sudamericano con la celeste en actividad. Su palabra, en exclusiva.
Nicolás Mazzarino es el emblema de Malvín. Capitán a los 44 años de edad, tiene en su reconocida trayectoria tres títulos de la Liga Uruguaya de Básquetbol en el club y cinco de Campeón Federal en otros clubes. El salteño conquistó el mundo, desde su pasaje por Boca Juniors hasta sus once años en la exigente liga italiana. Y tiene el privilegio de ser el único Campeón Sudamericano celeste en Maracaibo, Venezuela, 1997 -parte del el plantel que dirigía Víctor Hugo Berardi- en actividad. El coronavirus paralizó al deporte mundial y dejó en suspenso la Liga. Y, en exclusiva, este emblema del profesionalismo dialogó con Tenfield sobre algunos de estos temas.
-¿Cómo asimilás este tiempo de emergencia sanitaria, alejado de la competencia en el básquetbol?
-Personalmente, he acatado la recomendación de estar encerrado desde el principio. Solo salimos para hacer las compras. En simultáneo hago los ejercicios que nos manda la profe -Florencia Somma- y algunos materiales.
-¿Es complejo adaptarse a la nueva rutina?
-Es difícil, pasaron tres semanas. Por más que uno se mueva en casa, no es lo mismo. La situación es complicada, pero lo que prevalece es la salud.
-¿Por dónde pasa el cambio más importante?
-Cambia radicalmente, no solo en los deportistas profesionales. En el básquetbol estábamos llegando a la parte más importante, específicamente a la definición, cerca de los playoffs. Es el momento en que el cuerpo está al tope de sus posibilidades. Por eso es más difícil.
-¿La preparación individual es diferente?
-A esta altura perdimos la forma física en su totalidad. Es lo que hay.
-Cuando vuelva, entonces, ¿será otro torneo, como consideran algunos entrenadores?
-Todos estaríamos en las mismas condiciones. Básicamente, la situación es mala. Si en algún momento vuelve la actividad, de todas maneras se necesita un tiempo para entrenar.
-Un acondicionamiento…
-Un mínimo de quince días. Hace 21 días no toco la pelota. Nunca me había pasado algo así en toda mi carrera. Me refiero al entrenamiento y a la competencia. No a lo que hago en casa, porque no es lo mismo. En el básquetbol hay que entrenar: el día libre es el siguiente al juego.
-Además de la comunicación con la profesora, ¿cómo hacen con el entrenador?
-Desde que terminamos, no hemos tenido contacto. Hablamos con la profe, trabajando a través de Zoom, para estar conectados con los compañeros.
-¿Tu experiencia te permite afrontar estos días de otra manera?
-Tal vez por eso lo veo de otra forma. Quizás los jóvenes sientan esa ansiedad por volver a la cancha. Tengo ganas, pero lo vivo distinto. Pienso en las inferiores. Mi hijo Francesco juega en formativas. Hablábamos de eso con mi señora. Es una lástima.
-Sos el único en actividad que se consagro Campeón Sudamericano con la Selección en 1997. ¿Qué te genera?
-Es un honor estar jugando. De todo ese grupo, sigo llevando la bandera. Y en ese sentido lo tengo en el corazón.
-Si cada año es una nueva historia, ¿qué representa este para vos?
-Es un reto mayor, sobre todo por mi edad. Es más difícil. Surgen nuevas ,etas. Tengo que pensar en mí para aportarle lo mejor al equipo. E intento trabajar en mi físico.
Nicolás Mazzarino, de Salto a su gran carrera en el básquetbol, cargado de reconocimiento. Capitán de Malvín, Historia Celeste, y su presente de cuidado familiar.