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Martínez, el patrón bohemio




Tomás Costa intenta escapara a la marca de Santiago Martínez.


10 septiembre, 2016
Fútbol Uruguayo Primera

Santiago Martínez, pieza clave en el mediocampo bohemio. Un verdadero pac-man, con recuperación y correcta distribución de balón. Ignacio González, clase y talento.

Tomás Costa intenta escapara a la marca de Santiago Martínez.

Tomás Costa intenta escapar a la marca de Santiago Martínez.

PEÑAROL

Gastón Guruceaga (5): Sin culpa en el gol. Andrés Rodales (5): Correcta labor por ambos laterales. Yefferson Quintana (5): Cumplió. Maximiliano Perg (6): Firme, expeditivo. El mejor de Peñarol. Mathías Rodríguez (5): Mejor en la proyección que en la marca. Angel Rodríguez (5): Solo en la contención, corrió para todos lados, pero sin poder cortar juego rival. Tomás Costa (4): Escaso aporte. Hernán Novick (5): Chispazos y un muy buen remate de pelota quieta, Nicolás Dibble (4): Muy poco, nervioso e impreciso por demás. Junior Arias (4): Navegante solitario. Gastón Rodríguez (4): Peleado con la pelota. Alex Silva (4): En la confusión general defensiva. Nahitan Nández (5): El ímpetu, las ganas y la entrega de siempre. Miguel Murillo (4): Mal habilitado, no pesó en el área contraria.

WANDERERS

Leonardo Burián (7): Seguridad y jerarquía en el arco. Notable rechazando un remate libre de Novick. Mauricio Gómez (5): Clausuró su lateral.  Diego Barboza (5): Seguro, sin errores. Gastón Bueno (6): Un muro en el fondo, impasable. Martín Rivas (5): Controló con solvencia su sector. Santiago Martínez (7): Un verdadero pac-man, con recuperación y correcta distribución de balón. Matías Santos (6): El socio de “Nacho” en el manejo de la pelota. Colaboró en la contención. Ignacio González (7): Talento y clase en plena vigencia. Autor del gol del triunfo. Manuel Castro (6): Velocidad y potencia por banda. Sergio Blanco (5): Rendimiento aceptable. Rodrigo Rivero (6): Incisivo y peligroso. Se “devoró” un gol, increíble marró desde dentro del área chica y sin golero en puerta, Adrián Colombino (7): Se “comió” la cancha. Ida y vuelta constante. Joaquín Verges y Rodrigo De Olivera (-): Sin tiempo para ser calificados.