Leonel Rocco: “Plaza es lindo desafío”
Leonel Rocco fue ratificado como entrenador en Plaza Colonia tras un período de transición con muchas bajas y ascenso de juveniles, que los ha hecho madurar, pero dejó al club en posición complicada para esta temporada.
“Es un lindo desafío. La verdad que el gerenciamiento no preveía esta situación, porque se hizo un semestre apostando a juveniles porque se suponía que no había problema de descenso, porque se suponía que se iba a sumar al uruguayo anterior al uruguayo especial, entonces nos encontramos hoy día en una situación complicada en el tema del descenso, que es un desafío muy importante para todos, para el gerenciamiento, para nosotros, el cuerpo técnico, para el grupo de futbolistas más los refuerzos que vayan a venir, pero con mucha confianza. El fútbol es permanente desafío así que estamos con muchas ganas de afrontarlo y empezar a trabajar, que lo vamos a hacer ya el miércoles.
-¿Cuándo te iniciaste como jugador?
-Mis últimos dos años como futbolista fueron en Rentistas, aquí, después que vine del exterior y tuve la posibilidad de que me dirigiera Carlos Manta. Ahí fue que lo conocí. Yo era el jugador de más experiencia del equipo y él de alguna manera me fue preparando para que viera las cosas desde otro punto de vista. Ya en el el exterior a mí me gustaba todo lo que tiene que ver con sistemas, trabajos tácticos, donde tuve entrenadores de muy buen nivel, en el fútbol mexicano, en el colombiano, siempre me gustó. Y apenas dejo de jugar, en el 2007, me retiro casi con 41 años y Carlos Manta me invitó a trabajar en el cuerpo técnico de él y ahí fue que arranqué y siempre me gustó. Debuté a los 18 años en Primera División y toda la vida atrás de una pelota, la pasión de uno que es el fútbol. En principio era entrenador de arqueros, con Carlos, pero él daba mucha participación y siempre preguntaba mucho y era muy abierto y uno fue adquiriendo muchas cosas. Hice el curso de entrenador. Con Carlos trabajamos cuatro años juntos, en Liverpool, en Bella Vista en Primera División 2008, en Tacuarembó en Primera Divsiión 2009, en Melgar en Perú, donde yo jugué, estuvimos en 2010, ahí yo ya como asistente y en el 2011 me llama Guillermo Almada para colaborar con el cuerpo técnico de él en River. Ahí estuvimos cuatro años que fueron espectaculares. Un recuerdo muy bueno, dejando mucha gente amiga. Un equipo al que le tomé un cariño muy especial y ahora me tocó la oportunidad para la que me preparé ocho años y medio. La de ser entrenador principal y se presentó junto a Carlos Manta que está como gernciador junto a Chiqui García acá en Plaza Colonia.
-¿Quiénes influyeron más en vos como entrenador?
-Cambiaron mucho los tiempos de entrenamientos de conceptos y de tácticas, pero Roberto Fleitas fue quien me hizo debutar en Primera División. En un momento muy bueno que tuvo Roberto, que pasó por Progreso, donde yo me inicié, después a los poquitos años siendo Campeón de América con la Selección Uruguaya y Campeón de América con Nacional. Luis Cubilla, que lo tuve en la Selección mayor en el 91, también un técnico adelantado en aquel momento, Eduardo Luján Manera cuando estuvo en Nacional… era un técnico que dejaba mucho, después en el exterior tuve a Peláez en Medellín, a Barrabás Gómez, que también tenía un panorama de fútbol distinto, porque el fútbol colombiano es distinto, pero que siempre aportaba, el Pecoso Castro que lo tuve en Independiente de Santa Fe. Fueron muchos los técnicos. Tuve a Maño Ruiz en México, a Carlos Daniel Jurado, uruguayo, también en México. Saúl Rivero y Jorge Aude, fundamental aquel Progreso del 89. Aprendí muchísimo con ellos, que transmitía muy bien lo que querían, que eso es importante. Ahora tengo que volcar todo eso a mis futbolistas.
-¿Existe un estilo de fútbol uruguayo o varios?
-El estilo clásico del fútbol uruguayo está, pero otra gente que ha jugado en el exterior quiere aplicar otro tipo de entrenamiento, de fútbol y cada cual es libre y si está convencido de lo que está haciendo es bárbaro. Lo que pasa que a veces lleva mucho tiempo poder implantar cosas, porque el futbolista ya trae un estilo desde formativas y si vos querés inculcar una idea que es un poco distinta a la característica natural del futbolista uruguayo, a veces no es que no lo puedas hacer, pero te lleva mucho tiempo y a veces los tiempos en el fútbol no dan. Los proyectos se cortan porque no se dan los resultados y a veces no hay la paciencia suficiente y vivimos en una constante dependencia de los resultados.
Es mi primer semestre como entrenador. Tengo muchísimas cosas que aprendí y que voy a seguir aprendiendo porque de eso se trata, de estar aprendiendo y por sobre todas las coas de estar abierto a mi cuerpo técnico. En este momento Martín Arriola es mi mano derecha, mi asistente, que dirigió la Tercera que salió campeona. Creo en los cuerpos técnicos participativos. No es mi estilo ser individualista. Cuanta más gente pueda sumar, mejor, porque ocho o diez ojos ven mejor que dos”.