Rampla Juniors, tres goles y tres puntos que lo colocaron en la zona alta de la tabla de posiciones y lo metieron de lleno en la pelea por los dos ascensos directos.

La gran victoria rojiverde se explica con una vieja, pero savia frase futbolera: “goles errados son goles en contra”. Lo pagó carísimo Sud América, que pecó de alarmante falta de puntería y de fortuna. No mereció la abultada derrota, pero al fútbol se gana con goles.

Y realmente el “picapiedra”, se mostró por demás práctico y contundente. Para ello, contó con un implacable Agustín Navarro. En mañana inspirada, saltó a la cancha en el minuto 6 para suplantar al lesionado Derlis Vargas, y no solo cumplió con la inexorable ley del ex, se despachó con un espectacular doblete (orientado cabezazo y toque preciso de derecha –uno en cada tiempo-) para marcar la diferencia en el tanteador que lo cerró con una excelente definición Matías Toma, en el tramo final del encuentro.

Rampla Juniors, retomó la senda triunfal, se llenó de alegría y sueña con el tan deseado retorno a Primera división.