La mochila del “Pocho”
El Defensor Campeón de 1976
“Debemos estar pensando en Oceanía” fue el comentario general de prensa y a nivel directriz luego del sorteo para las Eliminatorias al Mundial siguiente (o Clasificatorias a mi entender, porque desde esa denominación de Eliminar hay un pensamiento NEGATIVO, en cambio son Clasificatorias, a mi entender, que como “plus” es positivo) que se llevó adelante hace poco tiempo.
En clara alusión a ubicarnos en un puesto de “repesca”; “repechaje” o cuanto calificativo se le quiera poner, tras la disputa de la fase Clasificatoria.
Si es cierto; los antecedentes nuestros desde 1957 en cuanto a clasificar a mundiales, no hay dudas, en el siglo pasado, fue de adversidades. Pero también es cierto que en los últimos 5 años hemos recogido un 4° puesto mundialista, un 1° de América, y un título de campeón Panamericano sub 22 que a falta de 4 años para el mundial los pone en una edad perfecta para ese evento; sumado a los que ya están; entonces porque sacar las cuentas de lo negativo, porque no alentar a lo positivo, desde afuera, porque desde adentro (futbolistas y entrenadores) esa “compulsa” “ni pica”, la de… “está difícil”.
Prof. José Ricardo De León
Sabemos por ejemplo que esta Brasil en esta próxima Clasificatoria, pero proceden del mismo país y que tendrán en promedio 25 o 26 años los que perdieron en esta final con los nuestros en este Panamericano de hace días, y no estoy hablando de hace 40 o 50 años.
Todo es difícil; la vida es difícil. O creen ustedes, en el caso de un entrenador, ¿qué es más difícil?; ¿tomar un equipo que esta para descender o un equipo que ha salido campeón recién? ¡Los dos iguales!; porque los retos son casi idénticos; los equipos que se salvan del descenso lo sienten como ganar un campeonato (que es el de permanecer en esa divisional); y el tomar un equipo que es campeón solo recibe la “moneda” de ser campeón nuevamente; porque si no lo es, encuadra dentro del fracaso. Entonces TODO es difícil; para los jubilados es difícil, para el obrero es difícil, para el minusválido es difícil, la vida nos dio el reto de lo difícil y solo los cobardes piensan y actúan basado en que luchen los demás y entonces si se gana……” me subo al carro” que es más fácil.
Luego de dejar plantada la semilla desde 1971 y hasta 1974 en el otrora Defensor el Profe José Ricardo de León se fue a su aventura azteca para demostrar que su teoría la podía aplicar en otras tierras y otra cultura.
En esa primera incursión y con un equipo pequeño como Atlético Español, que además cuando lo tomó ya con el campeonato empezado, estaba sumido en una crisis deportiva; definió el Torneo mexicano y lo llevó al vice campeonato. Inmediatamente lo contrata el Toluca y lo llevó a ser campeón de aquel país en esa temporada 1974-75. Viaja a la Argentina y dirige con éxito, ya que gana la primera ronda clasificatoria de su grupo de aquel torneo, a Rosario Central, donde además pone en la palestra a un tal Mario Kempes…
El Defensor Campeón de 1976
Cuando regresa a Uruguay en 1976 para hacerse cargo nuevamente de Defensor y continuar su obra empezada en 1971 y donde en su primer reportaje declara: “Vengo para ser campeón con Defensor”.
Hoy en el 2015 no sería una cosa descabellada dar esa “sentencia”, pero en ese 1976 se cumplían nada menos que 44 años, desde 1932 donde NADIE sin ser Peñarol o Nacional; Nacional o Peñarol había sido campeón uruguayo en el profesionalismo. No era un vaticinio con garantías; las únicas que había eran su trabajo, su pensamiento, su sentimiento y su acción; llevada adelante en forma brillante por aquellos épicos defensores de la casaca violeta en el campo de juego, que pasaron a ser leyenda.
Y FUERON CAMPEONES QUEBRANDO LA HISTORIA, con una vuelta olímpica que la llevaron adelante AL REVES, con diferentes interpretaciones, en aquel momento y hasta hoy.
Las grandes glorias nuestras SIEMPRE fueron llevadas adelante “contra viento y marea”; así estamos hechos; pero también es cierto que la “caparazón” que envuelva a los protagonistas directos siempre es “doble pechuga”.
No voy a dar más ejemplo, en esta nota de hechos y adversidades que ya son historia y que sirven de ejemplo de entereza ante la adversidad y acción ante circunstancias negativas y que los protagonistas las transformaron en “oro” desviando una “aureola” de malos augurios.
No se hubiera descubierto América, Hitler no hubiera caído, la India si no fuera por el Gandhi no hubiera sido libre, y miles de ejemplo de luchar contra la adversidad, porque la vida es eso, y para dar vuelta eso se precisa quien crea que lo puede dar vuelta; y en todos mis años dentro del futbol JAMÁS escuche ni a compañeros ni a mis dirigidos…..”Mejor no entremos a jugar”; la adversidad es un desafío que se quiere vencer SIEMPRE, desde adentro del vestuario. Es claro que no siempre se gana.
Cuando era muy joven mi padre, el “Negro” Julio Cesar Longo, escuchaba a un gran intérprete uruguayo; Roberto Rodríguez Luna; que generalmente interpretaba al poeta Fernán Silva Valdez; y siempre está en mi cabeza una estrofa permanentemente de una canción de aquel, para el caso de perder, y significando no perder antes……..”Que me hallen caído pero hecho pedazos”.
Domingo Pérez.
Qué lejos está del pensamiento, sentimiento y acción de aquellos que se pondrán la “celeste” el “mirar” para Oceanía.
Un día el gran Domingo Pérez, que aun anda hoy en su “bici” o corriendo con sus casi 80 arriba; me dijo ante una consulta de si había sido premiado por ser 2 veces campeón de América con Uruguay (1959 y 1967) por la A.U.F; y donde su respuesta fue tajante;……“no tienen porque premiarme, cuando me ponía la celeste, la obligación era mía”.
Y un detalle a tener en cuenta; es que los que actúan, sienten y accionan son los jugadores con el entrenador. Esos deben estar fuertes porque en la historia nuestra siempre lo han estado. Y es, para mí, como dice mi amigo Rubens “Pocho” Navarro, en una gran sentencia suya y una gran verdad; ¡¡ qué lindo es “cargar con la mochila del 50”!!, porque eso nos obliga.
