La mano de Suárez que cambió la historia
¿Qué hubiese pasado si Luis Suárez no evitaba con la mano el gol de Ghana? La incidencia en el final del alargue marcó un punto de inflexión en el proceso Tabárez.
El juez portugués Olegário Benquerença expulsa a Suárez. Luego el penal de Gyan en el palo que es acompañado por la mirada de Fernando Muslera en el dramático final del alargue.
“No es la mano de Dios, es la mano de Suárez…” ironizaban hinchas celestes en el interminable festejo en Montevideo horas después que en Johannesburgo, el delantero del Ajax holandés -en ese entonces- propiciara una incidencia que marcó un antes y un después en la “Era Tabárez”.
Si la mano salvadora de Suárez no aparecía, era el gol que Ghana siempre había soñado hacer y Uruguay quedaba eliminado del Mundial de Sudáfrica 2010 en cuartos de final.
El penal derivó en la expulsión de Suárez. La frustración del salteño y el consuelo de Sebastián Eguren al salir de la cancha, que segundos después tuvieron desahogo cuando Asamoah Gyan malogró el disparo y el “9” celeste lo festejó como un gol de arco a arco y le volvió el alma al cuerpo.
Uruguay avanzó a semifinales del Mundial pero se quedó sin Suárez para el encuentro decisivo ante Holanda. La falta del goleador se sintió en una instancia clave para poder soñar con llegar a un título Mundial después de 60 años.
La mano de Suárez marcó un antes y un después en el proceso Tabárez. La mano de Suárez cambió la historia.
