José Batlle Perdomo mirando a Stéfano
Presencias: En el estadio de Fénix en el parque Capurro, donde Rentistas ofició de local, estuvo el técnico del Centro Atlético Fénix, Gustavo Bueno. También, entre otras personalidades del fútbol, José Batlle Perdomo, cuyo hijo Stéfano jugó de golero en Rentistas, de buena actuación en general en la victoria local.
Cruzados: Los buzones jugaron con camiseta alternativa blanca con una cruz delantera, como la que lucían en sus uniformes los soldados de las cruzadas pero del tradicional color naranja de los buzones y pantalones naranjas.
Susto: Cuando Fernando Arismendi y Sebastián Ramírez fueron a disputar una pelota de ataque de los buzones por derecha, pasando pocos metros la mitad de la cancha hacia el arco del local, chocaron en busca de ganar la posición y Arismendi, que iba a la carrera, se desestabilizó y se fue de cabeza contra el muro que separa la cancha de la platea. Desde las cabinas del estadio de Capurro se oyó el golpe de la cabeza de Arismendi contra el muro y enseguida se detuvo el juego con la preocupación de todos los actores, de Sebastián Ramírez el primero, que inmediatamente pidió atención para el compañero. Pasaban los segundos y no se reponía. Ni desde las tribuna ni desde las cabinas se lo veía porque el muro lo tapaba. Por el fuerte sonido del golpe se temieron consecuencias de gravedad, pero, felizmente, a poco que se reanudó el partido -que estuvo, por esta incidencia, un minuto detenido-, vimos a Fernando Arismendi reincorporarse. Consultado por los jueces y por los profesionales de la IASA, respondió que estaba para seguir jugando y fue autorizado a reingresar a la cancha. El accidente fue al minuto 27 del primer tiempo. Arismendi jugó perfectamente, sin resentir el golpe, el resto de su actuación. Fue sustituido al minuto 13 del segundo tiempo.
Tarde primaveral junto a la bahía: Una tarde muy agradable, primaveral, aunque estamos todavía en invierno, vivimos en el parque Capurro, con la maravilla de la bahía que caracteriza a la cancha de Fénix.