Indemnización por formación y mecanismo de solidaridad. Parte I
No descubrimos nada si afirmamos que los clubes del fútbol uruguayo, aún los de primera división, tienen severas carencias económicas. Ni que hablar los de segunda o los clubes del interior. Cuánto más humilde la institución las carencias se transforman en urgencias, y sus dirigentes en administradores de pobreza.
Pero todos los clubes, desde el más pequeño al más grande, son formadores de jugadores , quienes de futuro pueden redundar enormes ganancias a otros clubes, personas o empresas.
Para la FIFA , el reconocimiento de derechos a los clubes formadores de jugadores se ha transformado en un pilar de su estructura asociativa.
Así, al aprobarse el “Reglamento sobre el Estatuto y Transferencia de Jugadores “ en el año 2001, se consagraron dos institutos: la indemnización por formación y el mecanismo de solidaridad.
Estos institutos parten de la premisa común de participar, con un porcentaje de la transferencia de un futbolista, a aquellos clubes donde el mismo se formó.
Estas herramientas son fundamentales para que los clubes obtengan otra fuente de ingresos. Lo que ocurre en la práctica es que son poco utilizados, muchas veces por desconocimiento de los dirigentes, otras por las dificultades que el sistema mismo plantea para obtener el cobro etc.
Cada vez más son los clubes que recurren a los servicios de profesionales especializados para hacer valer sus derechos, planteando reclamaciones por estos rubros cuando su pago es omitido.
Desde este espacio en nuestro próximos encuentros, analizaremos ambos institutos, sus diferencias, sus dificultades y las posibles soluciones, buscando informar básicamente a los clubes formadores, para que no renuncien al cobro por una actividad que ya realizaron: la formación de un jugador.
Hasta la próxima