Gutiérrez: “Hay que invertir el tiempo en conocimiento”
“Hoy, el apoyo que se les brinda a los futbolistas pasa por bajarlos a tierra de dos maneras, a nivel individual y a nivel grupal”, explicó Gabriel Gutiérrez, psicólogo, a manera de presentación.
Gabriel Gutiérrez es Licenciado en Psicología y está especializado en el área deportiva. Actualmente cumple funciones en Nacional y en la clínica Mets, donde es consultado por atletas de distintas ramas del deporte nacional. Trabaja sin interrupción desde 1995 en distintos clubes de fútbol, básquetbol, tenis y ciclismo. En las selecciones uruguayas juveniles, cumplió un extenso período que abarcó desde 2006 a 2011. En los últimos días regresó al país procedente de Honduras, ya que forma parte del cuerpo técnico que encabeza Fabián Coito, conductor del denominado combinado “catracho”, y tuvo tiempo para dialogar con Tenfield.com.
“El sentimiento de angustia e incertidumbre, de no saber cuándo retornaremos a la normalidad, reafirma la necesidad de ocuparnos del hoy de manera productiva, sin pensar tanto en el mañana”: el profesional y su primera reflexión, a modo de introducción.
-¿Qué apoyo psicológico se les brinda a los deportistas, teniendo en cuenta la emergencia sanitaria?
–En mi caso, el apoyo que les brindo a los futbolistas, que sobre todo es motivo de orgullo y privilegio, es bajarlos a tierra de dos maneras, a nivel individual y a nivel grupal.
-¿Cómo se logra?
-Actualmente, a nivel individual por videollamadas. A partir de la semana próxima retomaremos las grupales, a través de la aplicación Zoom.
-¿Qué temas son tratados con los futbolistas hoy en día?
-En líneas generales, convencerlos de que estamos atravesando dos variables. La primera depende de nosotros mismos, y la segunda, no. La que depende de nosotros es qué hacemos con el tiempo libre. La que no depende de nosotros es la que implica paciencia, quedarse en casa y sobrellevar la situación única y extraordinaria que estamos viviendo. Y no solo hablo de los deportistas, hablo en conjunto de la sociedad. Muchos pacientes me han comentado que están cambiando sus sueños, y que éstos son principalmente de angustia. Una angustia que es normal en cualquier persona en estos tiempos. La salida de la angustia pasa por ocupar el tiempo en algo productivo. Tenemos que dejar de estar pendientes todo el día del coronavirus.
-¿Y cómo se logra ese escape del coronavirus?
-Apoderarse un poco de información diaria sobre lo que está ocurriendo con la pandemia está bien, porque es necesario saber dónde estamos parados. Pero quejarnos y seguir insistiendo con el tema no sirve de nada. Todo lo que uno se proponga hacer es muy bueno para la salud mental. Trazarse un objetivo, por ejemplo aprender inglés. Un objetivo, una planificación y una ejecución que impliquen una rutina diaria con hora de comienzo y de fin, y con el correspondiente monitoreo del resultado. En una palabra: que lo que estoy haciendo me haga sentir bien.
-La ansiedad siempre juega un papel muy importante, sobre todo en los deportistas de élite. ¿Es un tema que preocupa hoy en día?
-La ansiedad es energía, y hay que gastarla en acciones productivas. Cada uno debe buscar sus puntos débiles y enriquecer su caudal de conocimientos y habilidades. Hay gente que no quiere estudiar, pero bien puede llevar adelante cualquier tipo de curso a través de la web. Google se convirtió en la herramienta mortal para los que ponen excusas. Se terminaron las excusas. No hay que matar el tiempo: hay que invertirlo en conocimiento. Se terminó aquella excusa de que no hay tiempo. Hoy lo tenemos para compartir en familia, y el deportista lo tiene para entrenarse. Cuando tengamos la oportunidad, pasada la tormenta que no sabemos cuándo va a terminar, podremos decirnos a nosotros mismos: “No hay mal que por bien no venga”. Y que aprovechamos el parate para desarrollar determinada actividad. Lo positivo hoy pasa por cumplir los objetivos que nos trazamos.
-¿En otras casos estas situaciones producen frustración?
-Emocionalmente, al no poder compartir el día a día con el grupo de pertenencia, se genera frustración. Y la frustración provoca agresividad: es una ley en Psicología. La podemos manifestar de dos maneras, hacia el entorno o hacia nosotros mismos. Es un tema delicado para todos, que trasciende a los deportistas. Hay gente que en vez de discutir, prefiere comer, se siente frustrada y evita sus problemas comiendo, que es una manera de autoagredirse, sea o no sea deportista.
-Pasemos a otro tema. En caso de reanudarse el fútbol, existe la posibilidad de que los partidos se disputen a puertas cerradas. ¿En cuánto podría influir este hecho en el rendimiento de los futbolistas?
-No es lo mismo. A puertas cerradas, no motiva tanto como jugar con público.
-¿Por qué motivo?
-Por una cuestión de contagio positivo. El hecho de tener “la mirada de otro” pendiente en ti genera diferentes niveles de agonística. En líneas generales, la hinchada empuja a elevar el rendimiento de los jugadores. La gente fomenta la agonística y la adrenalina. Y aclaro que a otros jugadores los puede llegar a bloquear.
Gabriel Gutiérrez, palabra autorizada. Psicólogo especializado en la rama deportiva, en su página web www.consultoriodeldeporte.com firmó un artículo titulado “Cuarentena3.0 #Hagamos algo!”, en el que vierte su particular visión de cómo sobrellevar de la mejor manera posible la pandemia del coronavirus.