Gonçalvez es decir Peñarol…
Néstor Gonçalves orgulloso con la distinción en primer plano y su padre "Tito" siguiéndolo de cerca.
Néstor Gonçalvez orgulloso con la distinción en primer plano y su padre “Tito” de fondo.
“Peñarol nació para ser el mejor…”, palabra del presidente Juan Pedro Damiani, en el discurso de apertura en la ceremonia de homenaje a los socios vitalicios, que este jueves se realizó por primera vez en hall central de la tribuna Frank Henderson del Estadio Campeón del Siglo, la catedral del pueblo carbonero.
Néstor Gonçalvez, el gran distinguido… El hijo mayor del inolvidable “Tito”, el capitán de capitanes, recibió una medalla de diseño exclusivo de manos del propio presidente, en reconocimiento a su indiscutida adhesión a la causa aurinegra. Supo lucir y defender con gallardía la camiseta de oro y carbón en los primeros años de la década del ’80. Retirado de la actividad futbolística se dedicó a la captación de juveniles, convirtiéndose en referente y acercando de su experta mano a centenares de jugadores a las divisiones formativas del club. Muchos de esos chicos se convirtieron en figuras de primer cartel mundial, último caso Federico Valverde, hoy en el fútbol español e integrando el plantel de la selección mayor uruguaya.
El apellido Gonçalvez, está indisolublemente ligado a la gran historia de Peñarol y no podía estar ausente de los festejos por el 126° aniversario.
Los dirigentes entonando el himno de Peñarol, en la ceremonia de homenaje a los socios vitalicios.
