“FEDE VALVERDE ERAN TAN BUENO QUE A LOS NUEVE AÑOS TUVE QUE ESCONDERLO”
“Néstor Gonçalvez es un histórico formador de Peñarol e hijo del ‘Tito’, campeón del mundo en los 60 con Peñarol en aquella final ganada al Real Madrid. Conoce a todos los chicos que han pasado por el club y fue el primero que acogió a Fede Valverde cuando llegó del ‘baby’ fútbol de su club de origen, Estudiantes de la Unión en Montevideo. “Me habían hablado de él y pedí que lo trajeran al club, pues lo querían de muchos lados. No podíamos ficharlo todavía, por temas legales, era tan bueno y tuve que esconderlo un año! Estuvo unos meses que no jugó en ningún lado, lo tuve casi raptado. Y después lo fiché ya para Peñarol. Todo ese tiempo lo tuve practicando conmigo hasta séptima división, cuando cumplió 13 años y ahí inicio el proceso de inferiores en juveniles”. Fueron cuatro años que aún hoy no los olvida Fede: “Yo -dice Néstor- lo tuve cuatro años, de los 9 a los 14. Mi primera impresión fue la inteligencia que tenía Fede para salir de los problemas aunque su físico era más menudo que el resto… y eso hacía que él tuviera que resolver con inteligencia”. Gonçalvez tiene claro que “el que no tiene ese talento a esa edad es muy difícil que le salga luego. El juego de Fede es un juego muy rápido y muy inteligente. El potencial que tiene es muchísimo. Una de las características del talento es la adaptabilidad y Federico, conforme iba teniendo más experiencia, se crecía. Cuando se fue de aquí le dije que no me iba a ver más, pero que nos encontraríamos en la selección. Y así fue. Aún tenía 17 años”. (Néstor Gonçalvez, captador de Peñarol, sobre la historia de Federico Valverde, en Marca, España).
