Despacito y por las piedras, Juventud se quedó en primera con el talento de Martín Icart
Trabajador, maduro, talentoso, humilde y realista. Es una de las figuras con las que cuenta Mario Saralegui en Juventud de Las Piedras. Vistió varias camisetas en el medio local, hoy en día es su propio representante y sueña con jugar en el exterior. En la decimosegunda fecha del Torneo Clausura fue la pesadilla de Nacional en el Estadio Centenario. El pedrense ganó 2:0 y le dio un golpe de knock out al tricolor. Por el talento que desplegó en ese partido, Martín Icart fue “el jugador de la etapa”.
Con veintiocho años, ha enriquecido su carrera en el medio local pasando por varios equipos. Debutó en 2002 en Bella Vista, cuando solo tenía diecisiete años y ante Peñarol. “Manolo” Keosseian fue el entrenador que lo puso en ese partido. Permaneció en el club “papal” hasta 2009, cuando pasó a Danubio. Ese mismo año llegó a Rampla Juniors, temporada en la que el “pica piedra” estuvo muy cerca de entrar a una copa internacional. Se incorporó a Defensor Sporting en 2010 y en 2011 pasó por Cerro y River Plate. En 2013 se sumó al plantel de Juventud para luchar por la permanencia en primera, objetivo que lograron el domingo con un gran triunfo ante Nacional.
Icart fue una de las figuras del partido, se adueñó de la pelota y desplegó todo su talento. “El día después de una victoria tan importante es bastante normal, es un día en el que estoy contento porque se consiguió el objetivo de quedarnos en primera y por el partido redondo de ayer. De a poco la gente te va saludando, sobre todo son cargadas.”
Juventud fue uno de los equipos que cambió de cuerpo técnico durante el Clausura. Comenzó el torneo bajo la dirección técnica de Ariel de Armas y hoy es dirigido por Mario Saralegui. Un cambio que siempre se siente dentro de un plantel. “El cambio de entrenador fue una decisión de la directiva. Que Juventud haya quedado en primera es un logro en el que hay que hacer partícipe al cuerpo técnico de Ariel De Armas. La llegada de Mario (Saralegui) nos hizo bien. Fuimos superiores a Nacional. No es fácil plantársele a un cuadro grande en el estadio. Nacional venía complicado. Nos teníamos que hacer fuerte en los primeros quince minutos, Mario nos dijo que saliéramos a buscar el partido. Bava hizo un partidazo, fue la figura de ellos. Si no fuera por él, hubiese sido un resultado abultado. Antes del partido firmábamos un empate, después hicimos un encuentro muy bueno. Nos faltó definir mejor.”
La realidad del equipo de Las Piedras ha cambiado en los últimos días. De una semana para la otra pasó de estar peleando el descenso a estar a salvo e ir en busca de un lugar en la Copa Sudamericana. La alegría de haber llegado a esa posición provoca tranquilidad en los jugadores, que sienten que el objetivo está cumplido. “Recién ahora nos sacamos la mochila del descenso. El objetivo principal era ese, de ahora en adelante la copa vendrá en su momento. La meta era dejar a Juventud en primera. Ir a una copa es importante para el club. Hay que tener los pies sobre la tierra, tenemos tres partidos importantes por delante. El objetivo primordial se cumplió el domingo. Cuando llegué al club me encontré con un grupo bárbaro con hambre de ganar. Ahora estamos más tranquilos, pero no hay que descansarse en los partidos que nos quedan por jugar.”
Con más de diez años de carrera profesional, Martín Icart trabaja duro para poder jugar en el exterior. Llegó a un acuerdo con su grupo de representantes, en buenos términos tomó la decisión de representarse él mismo ya que se siente maduro y capacitado para hacer ese trabajo. “En el medio he estado en varios equipos, no he podido salir afuera para hacer una diferencia. Aspiro a terminar el campeonato de la mejor manera para salir y andar bien. Los partidos que miran acá son los de los grandes, por eso tenes que jugar bien y aprovechar la oportunidad. Uno se siente con mucha confianza en un partido como el del domingo. Soy consciente de que tengo veintiocho años, por eso ir a Europa es mucho más difícil. Lo mejor sería un cuadro de Sudamérica. Hay muy buenos mercados, el brasilero, el mexicano, el colombiano. Además, a cualquier jugador le gustaría pasar por un grande. Son cosas del fútbol, hace un par de años me separé del grupo que me representaba. Fue algo que lo hablamos y no hubo problemas, hasta hoy en día me sigo hablando con alguno de ellos. Yo creo puedo negociar mi pase, me siento mucho más maduro.”
Sin referentes que haya seguido, Icart disfruta de ver a los grandes talentos que tiene el medio local. Y tras haber pasado por varios clubes, fue en Rampla Juniors donde encontró al entrenador que más lo marcó. “No tengo jugadores referentes, me gusta la forma en la que juegan el “Chino” Recoba y el “Tony” Pacheco. Cuando era chico jugaba con ellos en el Estadio y no lo podía creer. Terminaba los partidos y no aprovechaba las oportunidades. Ahora uno es más maduro y encara distinto estas situaciones. Es como todo, con un técnico con el que anduve muy bien e hice una gran relación fue con Eduardo Del Capellán en Rampla. Hicimos un campeonato bárbaro y por diferencia de goles no entramos en la copa. Se hizo un gran trabajo y un muy buen campeonato.”
En un momento de festejo y felicidad para Juventud, Martín Icart le deja un mensaje de aliento a la hinchada y uno de agradecimiento a la directiva pedrense. “Le tengo que agradecer a Juventud por abrirme las puertas para volver a jugar, ellos confiaron en mí y estoy sumamente agradecido. El primer objetivo está cumplido, vamos a seguir en primera. Tenemos un proyecto muy serio. Ahora tenemos que cerrar un torneo muy bueno. No hay que descansarse y ganar los tres partidos que nos quedan. En una de esas entramos en una copa. Pero son puntos muy valiosos para el año que viene. La hinchada tiene que estar tranquila, hay un gran grupo de trabajo.”