¡Dejen hablar a Urruzmendi!
El fútbol uruguayo –sus dirigentes y los jugadores–, han sido precursores de las grandes ideas y las propuestas que con el paso del tiempo se convirtieron en negocios de impacto mundial. Voy a referirme a uno muy poco conocido. Se trata de la participación de los jugadores de fútbol en el periodismo después que “cuelgan los botines”. Fue en nuestro país, donde por primera vez los ex protagonistas incursionaron en el periodismo.
El primero de ellos fue Luis Alfredo Sciutto. “Centrojás” de Bella Vista, pasó a Nacional y vistió la camiseta celeste en dos partidos ante Paraguay. Ocurrió en la gloriosa década del veinte. Combinaba su actividad futbolística con su trabajo nocturno en la Western, la empresa telegráfica más importante de aquel entonces. Cuando abandonó el fútbol, metió el potrero y la terminología popular en el periodismo. “Shoteando desde el Wing” era el nombre de su columna firmada, justamente, con el seudónimo de Wing que acertadmente le eligió “Peloduro” en “El Nacional”. Simultáneamente y para demostrar que no hay nada nuevo bajo el sol, pasó a integrar el plantel de Radio El Espectador.
Con la conducción de Raúl Barbero, por las ondas de Radio Fénix, en las noches domingueras de la década del treinta, se difundía un programa donde José Nasazzi, Pellegrín Anselmo y Juan Píriz, hablaban de fútbol. El “Mariscal” Nasazzi, años más tarde, junto con Luis Schiappapietra y Novel Valentini, tenían un programa en CX 32 Radio Sur. Entre otra temática que abordaban, dedicaban unos minutos a entrevista a los botijas, cuando comenzó a surgir el “baby fútbol”. Siendo un gurí, una noche me llevaron a mí y a varios más a la audición. Preguntaban el nombre y alguna pequeña cosita. Cuando tocó mi turno, Nasazzi me interrogó…
-¿Nombre?
-Atilio Garrido
-¿Sos algo de aquel Garrido que jugaba en la línea media fenomenal que tenía Universal, integrada con Mongelar, Etchart y Garrido? preguntó el Capitán de Capitanes.
-No señor…”
En la década del cincuenta Marcelino Pérez alternaba sus funciones de director técnico con la de periodista escrito. Nacido en Argentina había sido un gran “jás izquierdo” de Nacional y la Selección de Uruguay que obtuvo el título de Campeón en el Sudamericano de 1935 en Santa Beatríz. Se inició escribiendo en “El Diario” de la noche.
Después el siempre querido y recordado Dalton Rosas Rioffo creó “Tierra de Campeones” en CX 24 La Voz del Aire. La audición iba todos los mediodías. Lo acompañaban el “Vasco” Cea, Baztarrica y años después se sumó Carlos Penino. Dalton fue un recio back derecho de Nacional transferido a Liverpool; el “Vasco” está en el Olimpo de la mejor gloria celeste de los años 20; Guido Baztarrica había jugado en Atlanta, Boca Jrs., Argentino de Quilmes, afincándose en Montevideo donde vistió la aurinegra y la de Racing. Carlos Penino, cuando ingresó al periodismo, hacía poco que había dejado de jugar en “su” Huracán Buceo.
Después, cuando el periodismo futbolístico uruguayo se llenó de “doctores”, desaparecieron los jugadores de las audiciones y los diarios. Y junto con ellos, copiando terminologías foráneas, nacieron los volantes, carrilleros, sttoper, batidore líbero, hasta llegar a los que hoy… ¡sabe leer el partido! ¡Por favor! No hay cosas más linda que hablar y escribir de futbol, con la terminología de la cancha.
En eso, nadie superó al “Vasco” Cea cuando inventó la frase famosa para explicar cómo jugaba aquel Uruguay multicampeón de los años veinte: “cortita y al pie”.
Marcelino Pérez concurrió como enviado especial de “El Diario”, al Sudamericano de 1949 en Río de Janeiro. Pocos saben que en ese torneo, al que Uruguay viajó con un plantel de juveniles con el refuerzo de 4 jugadores profesionales que no acataron la huelga, le iba ganando a Brasil 1:0 en el estadio de Vasco da Gama. Al mismo Brasil que un año después cayó ante Uruguay en Maracaná. También, muy pocos saben, que en ese Sudamericano perdió Brasil 0:1, con Paraguay quedando igualados en el primer puesto ambos países. La crónica de Marcelino sobre este partido es tan perfecta, al punto que reveló la estrategia táctica utilizada por los guaraníes para vencer a los norteños. ¡El mismo sistema que un año después utilizarían los celestes de Juan López con idéntico resultado!
Desde hace un par de años atrás, Tenfield produce para la señal VTV el programa “Kapos” con la participación de ex jugadores destacados de nuestro fútbol, que dejaron de jugar hace pocos años. Los conducido casi siempre por Sergio Gorzy y ocasionalmente Alberto Sonsol. Ambos llevan muy bien el programa porque dejan hablar y opinar a los futbolistas. Ellos tienen una forma particular de expresarse y, además, “ven” cosas diferentes que el periodista no logra captar.
Desde hace meses en “La Hora de los Deportes” participa como panelista José Urruzmencdi. Cada vez que “Pepito” opina –cuando le otorgan la palabra–, pone sobre la mesa una visión diferente y muy atinada. Son conceptos diferentes a los que manejan los periodistas.
El domingo, por ejemplo, Urruzmendi descubrió “algo” que nadie veía. Que Zambrana tiene una gran habilidad para sacar el centro cuando viene lanzado a toda velocidad por la izquierda. Son centros de gol, como se decía antes.
Cuando el televidente comienza a tomarle el gusto a lo que Urruzmendi vio con otros ojos –ojos típicos del futbolista–, y expresa de otra forma el razonamiento, los demás panelistas lo cortan, lo interrumpen. Inclusive para hablar del descubrimiento que observó el porpio “Pepito”. Y cuando le devuelven la palabra el hilo que remonta la cometa mental de Urruzmendi se fue para otro lado, hacia otro rumbo…
Como Urruzmendi no es periodista, no compite con los colegas de la profesión y no está acostumbrado a que hablen todos juntos, uno encima del otro, “pisándose” para que el televidente no entienda nada, “Pepito” se calla, queda entrecortado y sus ojitos celestes se pierden contemplando el panorama que él no comprende mucho.
Por esto lo del título, ¡por favor, dejen hablar a Urruzmendi! Lo digo, exclusivamente, como televidente.