Curutchet: el Presidente de Danubio que llegó de Barcelona
Oscar Curutchet, presidente de Danubio y Sub secretario de la Junta departamental de Montevideo, posa en la sala de sesiones de la Junta.
Oscar Curutchet, presidente de Danubio y Sub secretario de la Junta departamental de Montevideo, posa en la sala de sesiones de la Junta.
Nació en Colonia del Sacramento en 1976, pero al año sus padres, perseguidos por la dictadura, debieron exiliarse en Barcelona, llevándose a Óscar y a su hermano gemelo. Volvieron con el retorno de la democracia y Óscar, con doce años, se enamoró de Danubio siguiéndolo a todas las canchas.
“Me empecé a enamorar del fútbol atildado de Danubio, del Polillita, del Pompa, de Dalto, de Edison Suárez, de Ever Moas, la defensa del Pecho Sánchez, Kanapkis, Nelson Cabrera, Da Luz, el golero era Zeoli, Ruben Pereira el volante central y unos cuántos más. Y vi que Danubio además tenía un respaldo popular que otros no tenían, que en las canchas chicas eso notaba y cuando íbamos al estadio también teníamos presencia. Yo no había visto a Cerro o a Rampla, pero en la zona donde yo vivo y vivía, en el Sarandí a diez cuadras de El Paso dela Arena, Danubio también tenía hinchas…
Cuando iba a la cancha, íbamos dos o tres del Paso dela Arena, algunos de Tres de Abril y venían siete u ocho hinchas desde Delta del Tigre hasta el Paso y abajo del Viaducto nos tomábamos un segundo ómnibus y después en General Flores un tercero hasta Belloni para ir a Jardines del Hipódromo.
Danubio tiene hinchada en todos los barrios de Montevideo y mucha en el Interior, por eso digo que es la tercera hinchada de Uruguay.
Recuerdo especialmente los partido contra Nacional, cuando lo eliminamos de la Copa Libertadores en el 89, 0 a0 el primer partido y 3 a1 la revancha y en la década de los noventa lo seguí a todos los partidos como una religión (yo digo que más que hincha o fanático, soy creyente de Danubio). En la década del 2000 ya mi fanatismo no era tan irracional: acompañaba a Danubio ya desde otra óptica, pero con la misma frecuencia y con mayor preocupación”.
Ahora la preocupación es máxima. Cuando me hace pasar a su despacho presidencial en la sede dela Curva, busca el interruptor de las luces, porque está atardeciendo y al demorar en encontrarlo, se disculpa: “Es que hoy estoy estrenándolo” y lo hace en un momento de grandes dificultades deportivas y con una realidad económica no mala, aunque difícil. Un presupuesto de trescientos mil dólares mensuales que deberá reformular para salir adelante con una buena gestión política, pero de política y de gestión Oscar Curuchet, a pesar de ser el Presidente más joven de la historia del club, tiene su experiencia.
En 1992, a los dieciséis años, comenzó a militar en la Juventud Socialista y en los comité de base del Frente Amplio. En el 98 adhirió a Asamblea Uruguay, “siguiendo la línea filosófica del mayor referente histórico del Frente Amplio, el general Líber Seregni y la política de Danilo Astori”. En 2005 ingresó como edil del Frente Amplio a la Junta Departamental de Montevideo. Está en su segundo período como edil y en julio de 2011 hasta julio de 2012 asumió como Presidente dela Junta Departamental de Montevideo.
El viernes fue electo Presidente de Danubio con cuatro cargos en la directiva de seis y asegura que gobernará también con los representantes de las otras dos listas, “Tenemos tres objetivos; primero lograr los puntos que nos alejen de la posibilidad de que Danubio tenga que pelear contra el descenso, cosa inimaginable para cualquier hincha de Danubio; el segundo es que a partir de un buen Torneo Clausura, Danubio pueda empezar a trabajar con otra tranquilidad hacia el Campeonato del 2013-2014. Y como tercer objetivo, que siempre lo pensamos y lo sentimos los hinchas de Danubio, trabajar hacia la conquista del Torneo Clausura.
Con 36 años se convirtió en el presidente más joven de la historia de Danubio.
Para eso tenemos que tomar una decisión estratégica que es la elección del cuerpo técnico. Normalmente es una decisión táctica determinada por objetivos estratégicos, pero en este momento de Danubio se trata de una resolución estratégica en la que no podemos equivocarnos, porque será el cuerpo técnico que posibilite que Danubio vuelva a pelear a corto plazo los campeonatos uruguayos.
Tuvimos una reunión con Daniel Martínez para una evaluación de su trabajo como coordinador de divisiones juveniles, pero fundamentalmente de los interinatos que tuvo con el plantel de Primera División. Acá quienes definen que Danubio va a salir adelante son los jugadores, los propios jugadores que hoy están en el plantel y alguno que se pueda incorporar. Ellos tienen la responsabilidad y el apoyo de toda la hinchada de Danubio, que es muy fiel y muy respetuosa de sus jugadores, que tienen la capacidad técnica para poder brindarle a la hinchada de Danubio la satisfacción que se merece”.
Sobre los hombres que se nombran como candidatos a director técnico, Oscar Curutchet se abstuvo de darlos, pero comentó: “Lo de Guillermo Almada está en los términos en que lo publicó Tenfield.com. ¿Lo escribiste vos?”. “Omar Puentes”, contesté:
“La orientación está puesta, en primera instancia, hacia Guillermo Almada, que tiene el perfil profesional que se pretende como entrenador. No es el único nombre en carpeta, habida cuenta que también está Eduardo Del Capellán en la nómina, así como Luis González y Leonardo Ramos. De todas formas, los primeros pasos se han dado y se comenzaron los contactos. En el caso de Guillermo Almada se pedirá autorización a sus pares de River para llevar adelante conversaciones. El entrenador tiene contrato vigente con los darseneros , aunque con cláusula de rescisión”.
Óscar Curutchet estrenó la luz en la sede del franjeado. Acaso una premonición.
