Crónica de un domingo bochornoso
La red en primer plano, los policías de cara a la tribuna Amsterdam. Perdió el fútbol.
Crónica de un domingo bochornoso… El fútbol, nuevamente quedó de lado. Los violentos volvieron a ser los grandes protagonistas.
La red en primer plano, los policías de cara a la tribuna Amsterdam. Perdió el fútbol.
El reloj se aproximaba a las 16:00 horas cuando estalló la “bomba” en las puertas de acceso a la tribuna Amsterdam… “Todo sucedió en la puerta 7 de la tribuna Amsterdam. Realmente nos agredieron con una lluvia de latas, botellas… Hasta con una garrafa de gas de 3 kilos nos tiraron que pudo haber matado a alguno de nosotros. Quisimos volver y otra vez comenzaron las agresiones”, contó Jorge García, funcionario de recaudación de la AUF. Tras ser agredidos, los funcionarios de recaudación decidieron retirarse de la tribuna y cerrar todas las puertas. Solamente efectivos de la policía, quedaron apostados delante de las vallas de seguridad.
Miles de hinchas con entrada en mano se quedaron en la puerta… Un minúsculo grupo –vale decirlo, no todos- apostados fuera con el apoyo de otros pocos desde adentro, se enfrentaron con efectivos policiales. Fue una batalla campal, con los hinchas lanzado piedras, botellas e incluso desde la parte alta de la tribuna, dos (¡2!) garrafas de gas de 13 kilos en contra de los efectivos de las fuerzas de seguridad. Un efectivo y un perro de la guardia resultaron heridos.
“La Amsterdam se cerró definitivamente, en las otras tribunas no pasó nada y seguiremos trabajando”, comunicó José Luis Otero, funcionario de recaudación de la AUF.
El juez Leodan González y la policía pasaron a ser principales actores. El vestuario de los árbitros se convirtió en centro de reuniones… Prestamente arribaron el presidente de la AUF, Wilmar Valdez y los presidentes de los dos grandes, Juan Pedro Damiani y José Luis Rodríguez, acompañados por la mayoría de los dirigentes de ambos clubes. Mientras tanto, los jugadores aguardaban en sus respectivos camarines…
La Policía propuso en primera instancia desalojar la Amsterdam para poder jugar el partido. “Con la tribuna Amsterdam ocupada no están dadas las condiciones para jugar…”, anunció Alfredo Clavijo, jerarca policial.
La suspensión se olía en el aire, el reloj marcaba las 17:20 horas… Los cabildeos y reuniones se sucedían en el vestuario de los jueces. Mientras la mayoría de los espectadores aguardaban en las tribunas, algunos ya resignados comenzaban a retirarse.
Los jefes policiales, encabezados por Mario Layera, analizaron minuciosamente los pasos a seguir en el tema seguridad y revieron su primera postura por el peligro a mayores incidentes. “Le comunicamos al juez que no estaban dadas las condiciones para disputar el partido por la situación que se registra en la Amsterdam, ya que la evacuación de la tribuna puede generar varias personas heridas”, expresó Mario Layera, jefe de policía de Montevideo.
Tras escuchar detenidamente las palabras del jefe de policía, el árbitro Leodan González determinó la suspensión del partido a las 17:40 horas. “El jefe de policía Sr. Layera, me manifestó que no estaban dadas las condiciones para jugar el partido por los problemas en la tribuna Amsterdam. Tomamos la decisión exclusivamente por el informe técnico del Ministerio del Interior. Cuando un jefe de operativo dice que no hay garantías, ningún árbitro va a dirigir. Nosotros procedimos a suspender, nada más…”, informó Leodan González.
Los jugadores de Peñarol se marcharon en silencio… Los futbolistas de Nacional caminaron hasta el talud de la Colombes para saludar a sus hinchas.
El fútbol perdió por goleada.
El árbitro Leodan González escoltado por la policía se marcha del Estadio Centenario.
