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“Cebolla”: torazo en rodeo ajeno




Cristian Rodríguez, torazo en rodeo ajeno. Ni el ostensible chichón en el parietal izquierdo pudo con "Cebolla".


12 octubre, 2016
Sin Categoría

Cristian Rodríguez, torazo en rodeo ajeno. Ni el ostensible chichón en el parietal izquierdo pudo con "Cebolla".

Cristian Rodríguez, torazo en rodeo ajeno. Ni el ostensible chichón en el parietal izquierdo pudo con “Cebolla”.

Cristian Rodríguez, volvió a ser aquel… Una ráfaga por la banda izquierda, un auténtico “tractor” arrastrando y dejando rivales por el camino.

Nació el 30 de setiembre de 1985 en Juan Lacaze e integra la selecta nómina de futbolistas que debutaron en plena juventud en la selección uruguaya. Lo hizo con apenas 18 años y quince días. Fue en Chicago, el 15 de octubre de 2003, en amistoso con victoria por 2:0 sobre México. Juan Ramón Carrasco, el entrenador, lo mandó a la cancha en el minuto 68 en lugar de Vicente Sánchez.

En su currículo presenta nada menos que presencias en cuatro Copas América -2004, 2007, 2011 –campeón- y 2015-, Mundial Brasil 2014 y Copa Confederaciones 2013. Convirtió 11 goles y disputó un total de 95 partidos que, lo colocan en el podio de futbolistas con más presencias, igualando la tercera posición con Diego Lugano.

Su velocidad, potencia, cambio de ritmo y generoso derroche de energías, lo convirtieron en referente del exitoso proceso que comanda Oscar Tabárez desde 2006.

Una mala racha de lesiones lo había relegado, dejado fuera de la Copa América Centenario y de citaciones en la presente eliminatoria. Su momento celeste parecía extinguirse…

Le costó arrancar, retornar a su nivel en Independiente, pero como lo indica la leyenda del “Ave Fénix”, resurgió de las cenizas, para dar nueva muestra del valioso futbolista que fue y sigue siendo.

En la “insoportable” Barranquilla, calurosa y húmeda, demostró sus excepcionales condiciones, poniéndose el equipo al hombro y llevándolo al frente, con toda su potencia, con toda su vergüenza deportiva, dejando a las claras que se trata de un ganador cabal en todas las canchas. Nada, ni nadie puedo detenerlo. Ni siquiera el espectacular choque de cabezas, gol incluido, que le produjo una ostensible inflamación en el parietal izquierdo. Fue una fiera, un auténtico gladiador. Torazo en rodeo ajeno.

“Cebolla”, camino al centenario con la gloriosa celeste, volvió a ser aquel…

Cristian Rodríguez al comando del avión celeste.

Cristian Rodríguez al comando del avión celeste.