¿Coates, Cacha y Gastón responsables?
Cristian Rodríguez, Vecino, Gastón Silva, Arévalo Ríos, Coates y Godín aparecen al final del partido ante Brasil. El aplauso que el público les tributó a los celestes al terminar la brega resultó en respaldo justo y necesario. Para transformar la realidad el técnico Tabárez apela a cinco cambios de los que surgen dudas sobre su efectividad.
Cristian Rodríguez, Vecino, Gastón Silva, Arévalo Ríos, Coates y Godín aparecen al final del partido ante Brasil. El aplauso que el público les tributó a los celestes al terminar la brega resultó en respaldo justo y necesario. Para transformar la realidad el técnico Tabárez apela a cinco cambios de los que surgen dudas sobre su efectividad.
Escribe Atilio Garrido / Fotografía Fernando González
Una vez más nuestro sitio web publicó en forma exclusiva la integración del equipo de Uruguay, dispuesta por el técnico Oscar Tabárez en la práctica realizada en Montevideo el sábado por la tarde, con cuatro cambios tomando como base el equipo que comenzó actuando el jueves ante Brasil. Dos de ellos marcan el retorno de los dueños de los puestos que no pudieron actuar por encontrarse suspendidos por acumulación de tarjetas amarillas. Son los casos de Fernando Muslera y Luis Suárez, que ingresan por Martín Silva y Diego Rolan.
Las otras dos variantes dejan entrever que a juicio del adiestrador uruguayo, los responsables de la debacle defensiva padecida frente a Neymar y sus compañeros, son los excluidos, es decir Sebastián Coates y Egidio Arévalo Ríos. Por ellos ingresarán José María Giménez y Álvaro González, respectivamente.
Para utilizar la terminología moderna que el periodismo de esta época virtual va introduciendo en el lenguaje, a nuestro juicio, el pensamiento de Tabárez demuestra que no leyó bien el partido perdido por goleada –nuevamente en el estadio Centenario- frente a los brasileños. Culpar exclusivamente a quienes pierden la titularidad de lo ocurrido el jueves en la cancha, aparece como la vana intención de tapar el sol con un harnero.
El sector defensivo de Uruguay por donde se floreó a su antojo Neymar, resultó ser el derecho de la defensa oriental. El jueves Neymar se movilizó exclusivamente por esa zona. Dejó de lado la polilfuncionalidad. Se estacionó como puntero izquierdo fijo y, desde ese lugar, arrancó mayormente en diagonal hacia el área, o desbordó con facilidad a Maximiliano Pereira. Corresponde decir –y así lo expresé en la valorización individual de los defensores de la camiseta celeste- que para que se produjeran las fallas continuas de contención del jugador uruguayo del Porto, se registraban como consecuencia del error inicial del primer escollo en que, teóricamente, debió constituirse Carlos Sánchez. Y en tercer lugar, para que Sebastián Coates no pudiera sostener sus rendimientos anteriores, la cadena de desaciertos había fallado en dos ocasiones, antes de llegar al tercer nivel representado por la presencia del portentoso zaguero derecho custodiando el área como último reducto.
Este razonamiento táctico también debe efectuarse para intentar llegar a la realidad sobre el otro chivo expiatorio que Tabárez encontró para justificar la caída ante Brasil: Egidio Arévalo Ríos. Es cierto que el Cacha no estuvo en su excepcional nivel de tantas ocasiones anteriores. Sin embargo, las falencias de su parsero por el sector derecho –Carlos Sánchez- y algunas debilidades del excelente capitán Diego Godín, remiso al no salir a cortar el juego a espaldas de la dupla de integrantes del doble cinco, contribuyeron en perjuicio del rendimiento de Arévalo Ríos. Asimismo, el nerviosismo con el que actuó Godín, hicieron que perdiera su habitual positiva serenidad, situación que se hizo evidente en el segundo gol de Brasil. Luego de una excelente atajada de Martín Silva, donde cede el rebote, es norma sabida que en esas instancias tiene que llegar la cobertura del zaguero. En esta emergencia, el siempre eficaz Godín apareció débil llegando tarde a la cobertura sin poder impedir el remate letal de Paulinho.
El ingreso de José María Giménez, a quién actualmente el técnico Simeone viene utilizando como integrante del doble cinco en el Atlético de Madrid, se justifica. Con una variante. A mi juicio debería sustituir a Maximiliano Pereira. Ese puesto lo ocupó Giménez y los desempeñó de manera notable, cuando debutó con la camiseta celeste jugando ante Colombia. Perdió una sólo pelota, la primera, y luego se afirmó para no dejar actuar a una estrella como Falcao.
La necesidad de reforzar la mitad del campo en la búsqueda de conservar el cero en el arco propio, deberían venir por la sustitución de Carlos Sánchez. ¿Es Álvaro González el hombre indicado? Arrastra una larga inactividad a raíz del conflicto que vivió en su anterior club italiano y, aunque apareció muy bien el debut ante Nacional, en los partidos siguientes disminuyó su exuberante rendimiento físico, siendo sustituido frente a los venezolanos de Zulia.
Lo precedente se “colgó” en la web www.tenfield.com en la noche de ayer. Esta mañana, lunes 27, se ha confirmado otra decisión adoptada por Tabárez en la última práctica realizada en Montevideo en la mañana del domingo. Jorge Fucile se transformó en el quinto cambio, al ingresar por Gastón Silva en el lateral izquierdo. La quinta variante -al igual que las anteriores- no deja de llamar la atención. A la luz de lo ocurrido ante Brasil, la zona defensiva más débil de Uruguay resultó ser la derecha, donde Maximiliano Pereira no pudo en ningún momento con Neymar. En cambio, por la izquierda la actuación de Gastón Silva resultó ser, a juicio de quién esto escribe, la más pareja de los cuatro hombres del fondo. Así quedó documentado en el análisis de las actuaciones individuales de cada uno de los jugadores celestes en el cotejo ante Brasil. De los pies de Gastón Silva, al recibir pase de Cristian Rodríguez, nació el centro al área que Marcelo intentó bajar de pecho “sobrando” a Cavani, quién le robó la pelota y generó la sanción del penal co nel cual Uruguay abrió el tanteador.
En síntesis, los cinco cambios que realiza Tabárez no parecen asegurar que se corrijan los errores expuestos por el sector derecho de la defensa de Uruguay.
Neymar, la gran figua de Brasil, brilló en el Estadio Centenario. Crack.
