Una noche negra
El árbitro Leodan González, suspendió a los 87 minutos el partido por falta de garantías. Boston River le ganaba 2:1 a Peñarol, en el Parque Viera, por la decimotercera fecha del Torneo Clausura.
Leodan González, a los 87 minutos tomó la determinación de suspender el partido por falta de garantías, debido a los proyectiles que eran lanzados de continuo desde la cabecera visitante que era ocupada por parciales aurinegros.
Peñarol, en situación crítica. Dentro y fuera de la cancha. Pésimo en el campo y para colmo de males deplorable comportamiento en las tribunas. Un caos.
BOSTON RIVER, GANABA…
Primera parte para el olvido del aurinegro. Con una pizca de fútbol, el manejo de José Alberti y el golazo de Cristian Olivera, le alcanzó al rojiverde para mostrarse en todo momento como una fuerza superior. El equipo de Ramos, un cúmulo de errores y desaciertos. Un sinfín de pases malogrados, lentísimo en sus desplazamientos y completamente nulo en ataque.
El gol de Nicolás Rossi, desde los vestuarios, en el mismo inicio del complemento, pareció cambiar el humor y la actitud de los carboneros. Que crecieron en el juego, y se posicionaron en campo contrario. Pero, siempre hay un pero. Juan Manuel Ramos, se equivocó y feo, perdió la pelota dentro de su propia área y no tuvo más remedio que derribar a Maximiliano Villa. Penal, correctamente sancionado y Agustín Rodríguez que no perdonó desde los once pasos para volver a poner en ganancia a Boston River. Dos minutos después, el partido fue suspendido por el árbitro.
Una noche negra.