El 2:2 de Cerro y Fénix marcó el contraste en el valor del punto conseguido. El albiceleste ganaba por dos goles en el Estadio Luis Tróccoli y lamentó el desenlace. El equipo de Capurro remontó y cambió con Ignacio Pereira. El zurdo generó el penal y la segunda conquista. El final se explica en el hecho de que el local no aseguró el trámite en la segunda parte. Entonces, se expuso a la presión del adversario. En la corrida del hondureño Carlos Fernández y la definición de Pereira, selló la igualdad.

Fue un partido abierto, con llegadas frecuentes de los dos lados y duelos individuales. Fénix comenzó mejor  y parecía desequilibrar en el mano a mano de los tres delanteros con los tres zagueros rivales. El debut de Julio Recoba, volante, no pasó  inadvertido. El golazo de Leandro Paiva, y luego el segundo de penal a Emiliano Villar –de gran primera  parte- le dieron la ventaja con el gol de José Luis Tancredi. Disimuló la lesión de Joaquin Boghossián -Nathaniel Revetria también debió cambiar a Mario García-, y con Alexander Machado también propició oportunidades netas.

Fénix dejó de lado la línea  de cuatro y reformuló el fondo con tres hombres. Pero fue Ignacio Pereira quien transformó el encuentro. Aceleró por  izquierda y le hicieron un penal que Maureen Franco –histórico de Cerro- ejecutó con precisión y envió a la red. La presión hizo efecto, y fungió como el desahogo que marcó el cierre. Fénix y Cerro atacaron para ganar, pero empataron.