Clásico festejo bohemio
Wanderers venció 2:0 a Danubio, en el Estadio JDH María Mincheff de Lazaroff, por la decimotercera fecha del Torneo Apertura.
Wanderers en casa ajena. Triunfo y pico del bohemio en el denominado clásico en blanco y negro.
La primera etapa fue pareja, por demás entreverada y entrecortada. En ese panorama, la visita sacó provecho, de una excelente jugada colectiva, con notable asistencia de Diego Hernández a Facundo Milán, quien con gran sentido de anticipación tocó el balón ante la salida del arquero local para marcar el gol de apertura.
El franjeado quemó las naves en el complemento. Asumió el protagonismo, fue decididamente al ataque, por derecha, por izquierda, por arriba, por abajo. Lo arrinconó al bohemio sobre su propia área, pero su falta de puntería y esa dosis de fortuna que siempre es necesaria le impidieron llegar al gol. Lo mereció, pero al fútbol se gana con goles. Y Wanderers, contundente y efectivo por demás con el segundo tanto convertido por Matías Fonseca, ya en los minutos de descuento se llevó los tres puntos de la Curva de Maroñas.