Alzó un tomate y lo creyó una flor
El cantante Edmundo Rivero inmortalizo este tango de Enrique Santos Discépolo-Virgilio y Homero Expósito de nombre Fangal, que habla de lo que ves o crees ver pero la realidad es otra.
“Napoleón tenía un gran ejército y en muchas batallas esperaba el momento justo, agazapado” declaró Álvaro Gutiérrez antes del clásico.
Además del Gran Corso Bonaparte , nacido en la Isla de Córcega, precisamente en Ajaccio, de ahí su apelativo; nuestro Héroe y Libertador José Gervasio Artigas en la gran Batalla de Las Piedras (1811) donde venció a las Fuerzas Realistas del Gobernador de Montevideo y nuevo Virrey del Río de la Plata, Francisco Javier de Elio en la tarde del 18 de Mayo, que eran comandadas por el Capitán de Fragata José Posadas, aplicó en plena batalla, como estrategia el contragolpe, que a la luz de los hechos le dio la victoria.
José Artigas y su ejército de mil hombres, se ubico en la Villa de Nuestra Señora de Guadalupe, mientras que el de Posadas era de más de 1.200 (a pesar que en plena Batalla más de 150 hombres se pasaron al bando revolucionario de Artigas) y posicionados en la altura del terreno. Mientras que los de nuestro Prócer eran hombres de campo, más los desertores. Los españoles eran profesionales, estando muy bien preparados para maniobras; teniendo artillería y disponiendo de fusiles modernos para la época.
Estando Posadas en posición ventajosa, por estar en la altura y Artigas en el llano; nuestro General mandó, haciendo el primer movimiento; enviando a parte de su ejército al mando de Antonio Pérez, a hacer el desgaste e inmediatamente Posadas abrió fuego, entonces Pérez (estratégicamente) ordenó la retirada. Como paso siguiente los españoles “bajaron” de su posición ventajosa persiguiendo las fuerzas que se retiraban. Mientras esto sucedía Manuel Artigas, primo del Prócer, al mando de medio millar de hombres armados de boleadoras y picanas, atacaron por la retaguardia a los españoles, que también recibían la embestida de las fuerzas de Antonio Pérez que de estar en “retirada” pasaron rápidamente “al ataque”. Las fuerzas de Posadas quedaron entre 2 fuegos, por detrás y por delante.
Resultado final y para darle un tono futbolero 5 a 0 a favor de Uruguay.
Mucha gente llega a denostar el contragolpe y “lo mezcla” con “ser defensivo”.
Todos somos contra golpeadores. Un ejemplo, si estamos en un fila para pagar la luz o para retirar plata de un banco (2 ejemplos para quedar bien con el “talud” y con el “palco”), y alguien nos empuja (es decir, estamos recibiendo un ataque), inmediatamente increpamos al que nos empujó, con un “¡¡qué haces!!” (Contra golpeamos, es decir atacamos).
El Profesor José Ricardo de León, ponía su “Bloque” (sus 10 jugadores de campo) en diferentes zonas de la cancha, a las que llamaba “cuartos”, y según le convenía esperaba o presionaba, y según la circunstancia de cómo “robaba” la pelota y en donde, contra golpeaba o no.
Diferentes formas de juego, diferentes sistemas, diferentes estilos, diferentes tácticas, todos en un momento aplican el contragolpe; Barcelona lo hace ….. cuando se da la ocasión. Es más que valido, y no es una herramienta defensiva, porque si sirve para ser campeón, hace “dar por tierra” ese argumento que muchas veces es irracional.
Si lo haces como una alternativa es una cosa, y como una constante es otra. Porque para eso tienes que tener los hombres adecuados. No podes tener rápidos por afuera pero los de adelante son lentos, y a la inversa tienes como “luz” los de adelante y “carretas” a los de afuera, no te va a “caminar”. Al igual si los del medio “no sueltan” la pelota. Todo es un equilibrio, pero que en algún momento del juego se usa el contra golpe como arma, eso siempre existe.
En la A.U.D.E.F, siempre se usó el contra golpe. Cuando no se les hacia contrato a los entrenadores (es decir que el ataque venia por no incluirnos), contragolpeamos con el 1er. Estatuto del Entrenador (1986); cuando se nos “echaba como “pan caliente” y no se asumían responsabilidades contractuales (el ataque estaba implícito), contra atacamos con los 3 meses de indemnización (1995); cuando la famosa palabra “acreditar” en el Artículo 5° del Estatuto no se tomó con el espíritu de “revalidar” (recibiendo otra ofensiva, tomado como metáfora, todos los ejemplos) inmediatamente contra golpeamos con la aprobación del Estatuto del entrenador actual (1999).
Ahora la F.I.F.A “atacó” con el tema de las Licencias para ser entrenador e inmediatamente nos pusimos de acuerdo con la A.U.F y son una realidad cercana los Cursos para entrenadores de futbol dictados por A.U.D.E.F en todo el país.
Para contra golpear solo precisas que te ataquen, por virtud del rival por o virtud tuya que haces creer que te “atacan”.
Una demostración magistral de contragolpe fue la demostrada en la revancha en el antiguo “Chamartin” (hoy Santiago Bernabeu) de Peñarol contra el Real Madrid al que vencieron de visita nada más ni nada menos que 2 a 0, con el gran Roque Gastón Maspoli en el banco, para consagrarse campeones del mundo en 1966.
Washington “Pulpa” Etchamendi, campeón de América y del mundo con Nacional, decía sobre el gran goleador argentino Luis Artime: “El gran secreto de Luis Artime es que sabe una barbaridad. Sabe tanto que puede darse el lujo de hacernos creer a todos que sabe muy poco”
Y a veces pasa con los campeones; que te hacen creer que juegan de una manera y……”zas”; “te arrancaron la cabeza”.