A todo o nada
Peñarol y Nacional definen el campeonato en estas dos últimas fechas. ¿Qué tiene que pasar para que salgan campeones?
Eduardo Darias y Leandro Lazano, mano a mano. Peñarol y Nacional, en la gran definición del Torneo Clausura y del Campeonato Uruguayo.
Tan solo dos partidos separan al Torneo Clausura de su final y de conocer quién se consagrará Campeón Uruguayo, pero el panorama aún no permite sacar conclusiones certeras.
Si bien Peñarol lleva una ventaja de cinco puntos en la Tabla Anual, matemáticamente aún no está sentenciada. En caso de perder sus últimos partidos y Nacional ganar los suyos, el Tricolor pasaría a liderar dicha tabla por apenas un punto, lo que le otorgaría la ventaja de cara a la definición del campeonato. En el Torneo Clausura, en cambio, tricolores y carboneros comparten la cima con 32 puntos.
Todo puede pasar en los dos encuentros restantes, pero ambos clubes tienen claro que solo existe un camino para alcanzar la gloria: ganar y ganar.
¿Qué tiene que pasar para que Nacional sea Campeón Uruguayo?
La recta final que atraviesa Nacional es delicada, porque no tiene margen de error. Si bien la posibilidad de remontar la Tabla Anual aún es real, la probabilidad es mínima. Además, depende de los resultados de su clásico rival, que en caso de ganar su próximo partido, ya la liquidaría. Por lo tanto, el objetivo principal del equipo de Martín Lasarte es quedarse con el Torneo Clausura, donde depende únicamente de sí mismo.
Sin embargo, entre los diferentes desenlaces que puede tener el Clausura, ninguno consagraría Campeón Uruguayo a Nacional de forma directa. Incluso, existe la posibilidad de un desempate, según establece el reglamento en caso de igualdad de puntos en la primera posición, lo que complicaría aún más el trabajo para el Bolso.
Ante este escenario, para que Nacional pueda finalizar con el trofeo en su vitrina, deberá ganar al menos tres de los cuatro clásicos consecutivos que se disputarían. El primero, por el desempate del Torneo Clausura. El segundo, por la semifinal ante al campeón del Torneo Apertura (Peñarol) y, por último, en caso de avanzar, deberá enfrentar al campeón de la Tabla Anual (también Peñarol) en una final de ida y vuelta.
Si bien el conjunto albo llega entonado, cosechando goleada tras goleada, los dos rivales que tiene por delante no serán tarea sencilla. El primero de ellos será Danubio, al que enfrentará en el Parque Viera el próximo miércoles 27 de noviembre. Aunque el equipo de Curva de Maroñas ya no tiene chances de pelear por el Clausura, se encuentra en la parte alta de ambas tablas y encontró su mejor versión en este torneo, siendo un rival difícil de superar. Sin embargo, en la última visita de Nacional al conjunto franjeado, en el Torneo Intermedio, el Tricolor se impuso con un contundente 6 a 0.
Finalmente, en la última fecha, tras cumplir con la sanción del clásico, los tricolores recibirán en el Gran Parque Central nada menos que a una de las grandes revelaciones de la temporada: Boston River. El Sastre ocupa la tercera posición de ambas tablas y ya aseguró su lugar en la fase previa de la próxima Copa Libertadores, aunque todavía debe definir si será en la fase 1 o en la fase 2.
¿Qué tiene que pasar para que Peñarol sea Campeón Uruguayo?
A diferencia de Nacional, el camino de Peñarol luce allanado y sin demasiados obstáculos. En la Tabla Anual, el Carbonero mantiene una ventaja de cinco puntos sobre Nacional, a falta de dos fechas. Una victoria ante Progreso, el próximo martes 26 de noviembre en el Estadio Centenario, le permitirá asegurar el primer lugar, inclinando el tablero a su favor en la definición del campeonato. De todas formas, este panorama positivo no significa que el equipo de Diego Aguirre pueda relajarse, sino todo lo contrario.
Al haber conquistado el Torneo Apertura, Peñarol tiene asegurado un lugar en la definición del campeonato. Sin embargo, necesita conquistar la Tabla Anual para obtener ventajas adicionales, por lo que el triunfo ante Progreso se convierte en una prioridad máxima para el conjunto mirasol. De ganar, el Aurinegro se quedará con dicha tabla, sin importar el resultado de Nacional. Solo restaría determinar el campeón del Torneo Clausura.
Si ambos equipos llegaran a la última fecha con los mismos puntos, se abren varios posibles desenlaces:
Si Peñarol gana y Nacional empata o pierde, el Carbonero se consagrará campeón del Clausura y, automáticamente, del Campeonato Uruguayo.
Si ambos cosechan el mismo resultado (triunfo, empate o derrota), finalizarán igualados en puntos en el Clausura, por lo que deberán enfrentarse en un desempate. Si Peñarol lo gana, será Campeón Uruguayo. Si pierde, deberá enfrentarse a Nacional en las semifinales, donde una victoria lo coronaría campeón, pero una derrota lo enviaría a las finales (ida y vuelta).
Si Peñarol empata o pierde y Nacional gana, el Bolso se quedará con el Torneo Clausura y ambos se verán las caras directamente en las semifinales. Si Peñarol resulta vencedor, será campeón; de lo contrario, se jugarán las finales (ida y vuelta). En este caso, no habría desempate por el Clausura.
Progreso, en el Centenario, y Fénix, en el Campeón del Siglo, serán los próximos y últimos rivales de Peñarol en el torneo. Ambos equipos luchan por la permanencia en la Primera División, en especial el conjunto de Capurro, que se encuentra en una situación muy delicada y con altas probabilidades de descender. Por lo tanto, si bien el fútbol nunca deja de sorprender, a diferencia de los rivales que enfrentará Nacional, Peñarol marca una notoria superioridad ante el Gaucho y el Ave, por lo que es el claro favorito para quedarse con las seis unidades en disputa.
EL ESCENARIO MÁS IMPENSADO
Todo indica que Peñarol y Nacional serán los que definan el Torneo Clausura y, por ende, el Campeonato Uruguayo, pero aún hay un tercer equipo al que las matemáticas le dan una mínima chance de alcanzar el título. Se trata de Boston River, quien hoy se encuentra seis puntos por debajo de los líderes. Si el Sastre ganara sus dos partidos restantes (uno de ellos ante Nacional) y tanto carboneros como tricolores no sumaran más puntos, el equipo de Jadson Viera igualaría el puntaje de los líderes del Torneo Clausura (32 puntos).
De esta manera, el primer puesto finalizaría con un triple empate, por lo que el formato de definición sería triangular; cada equipo enfrentará a los otros dos y el que sume más puntos, será el campeón del Torneo Clausura. Según el reglamento, en caso de una igualdad de puntos entre dos equipos durante el desempate triangular, la diferencia de goles será el criterio diferenciador. Si también empatan en ese aspecto, se revisarán los goles a favor, y si también igualan en eso, se jugará un nuevo partido de desempate.
Luego de determinarse el campeón del Torneo Clausura, excepto que sea Peñarol, se procederá con la disputa de la semifinal y las eventuales finales para conocer al Campeón Uruguayo 2024.
La recta final; a todo o nada.
