Igualdad que no ayuda
En el Gran Parque Central, Nacional y Sao Paulo empataron sin goles en el duelo de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores. La vuelta, el próximo jueves en Brasil.
Sebastián Coates y Diego Polenta se retiran cabizbajos del Gran Parque Central, luego del empate ante Sao Paulo.
Nacional no pudo superar a Sao Paulo en el Gran Parque Central y empató 0:0 en el duelo de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores. El Bolso dejó pasar la oportunidad de quedar en zona de clasificación al Mundial de Clubes, ya que debe superar a Olimpia de Paraguay -al cual igualó en puntos hoy- y para eso necesitaba las tres unidades que representan este juego. Ahora, con una serie que quedó abierta, deberá sumar en Brasil el próximo jueves, en el estadio Morumbi, para lograr dicho objetivo, así como la clasificación a los cuartos de final.
Luego de un espectacular recibimiento tricolor, ambos equipos salieron a la cancha con sus intenciones claras. Por el lado del local, aprovechó el fuerte impulso del aliento de su hinchada y aplicó una presión incesante durante los primeros 10 minutos, haciendo sentir la localía. La visita, en cambio, se concentró en tener la pelota en todo momento y no se preocupó por atacar. Con un juego horizontal y pasivo, se defendió con la pelota en sus pies.
Sin embargo, al no avanzar metros, Sao Paulo jugó con fuego. Nacional no bajó los brazos respecto a la intensidad, permaneció en zona ofensiva y fue con muchas piernas a presionar, recuperando numerosas pelotas -en especial Rubén Bentancourt y Christian Oliva- ante una defensa que quedaba mal parada. Pero el Tricolor también fue víctima de su propia ansiedad, ya que no logró tener la calma suficiente para tomar la decisión correcta a la hora de finalizar las jugadas. Tampoco tuvo claridad en las entregas ni en los centros, que fueron incontables y desperdiciados. En el área, Bentancourt no pudo imponerse desde arriba, siendo superado en los duelos por el zaguero Rober Arboleda -de gran partido-, al que luego le cometía faltas en su intento por recuperar el balón.
Ya con el tiempo avanzado, el equipo dirigido por Martín Lasarte -quien estuvo activo desde el costado de la cancha, pero tarde con los cambios- bajó el ritmo. El conjunto brasileño, entonces, parecía comenzar a salir del fondo, pero no tuvo precisión en los pases de sus mediocampistas, por lo que estuvo siempre lejos del arco custodiado por Luis Mejía. Pero Nacional nunca encontró caminos claros hacia el gol.
En el comienzo del segundo tiempo, la dinámica del partido cambió. Sao Paulo se adelantó con el balón y perdió un poco de timidez para progresar, pero no tuvo profundidad. Nacional, por su parte, continuó apostando por el juego directo y vertical, ya sin ideas y sin la misma intensidad que en los primeros 45 minutos. Además, el apuro por terminar las jugadas continuó siendo su peor enemigo. Por otro lado, los espacios en la mitad de la cancha se empezaron a abrir y los brasileños los aprovecharon para salir del fondo y pasar al ataque.
Ya demasiado tarde en el partido, Lasarte vio que el equipo se alejaba del arco rival, así que mandó a la cancha a todas las caras nuevas del equipo. En ofensiva, colocó al “Diente” López -en su esperado regreso al club-, quien debió haber ingresado antes, y al colombiano Diego Herazo para ganar presencia y peso en el área. En el medio, Nicolás Rodríguez tuvo su debut para refrescar piernas, pero tampoco tuvo tiempo para gravitar con su buena pegada. Minutos más tarde también entró Mauricio Pereyra, ya en los minutos finales, por lo que el técnico tricolor puso toda la carne en el asador con cambios que pedía el partido, pero todos ellos muy tarde.
Nacional insistió y empujó hasta el final ante un rival que se cuidó demasiado y que supo hacerlo de manera inteligente, pero no pudo quebrar la paridad, por lo que ahora deberá ir en busca de sus objetivos en un duro desafío en Brasil, el próximo jueves.
COPA LIBERTADORES DE AMÉRICA
OCTAVOS DE FINAL
PARTIDO DE IDA
JUEVES 15 DE AGOSTO
NACIONAL-SAO PAULO (BRASIL)
Cancha: Gran Parque Central.
Juez: Facundo Tello. Asistentes: Ezequiel Brailovsky y Pablo González.
Cuarto árbitro: Andrés Merlos. VAR: Jorge Baliño. AVAR: Pablo Dovalo (Jueces de Argentina).
NACIONAL: Luis Mejía, Leandro Lozano, Sebastián Coates, Diego Polenta, Gabriel Báez, Christian Oliva, Lucas Sanabria (81′ Mauricio Pereyra), Alexis Castro (75′ Nicolás Rodríguez), Antonio Galeano (63′ Jeremía Recoba), Diego Zabala (75′ Nicolás López) y Ruben Bentancourt (75′ Diego Herazo). Director técnico: Martín Lasarte. Suplentes: Ignacio Suárez, Juan Manuel Izquierdo, Mateo Antoni, Felipe Cairus, Guillermo López, Gastón González, Gonzalo Petit.
SAO PAULO: Rafael, Rafinha, Robert Arboleda, Alan Franco, Welington, Luiz Gustavo, Damián Bobadilla; Lucas Moura (84′ Michel Araújo), Luciano (76′ Rodrigo Nestor), Ferreira (46′ Wellington Rato) y Jonathan Calleri. Director técnico: Luis Zubeldía. Suplentes: Jandrei, José Sabino, Nahuel Ferraresi, William Gomes, Rodriguinho, Patryck, Joao Moreira, André Silva, Marcos Antonio.
Tarjetas amarillas: 12′ Diego Polenta (N), 24′ Luciano (SP), 36′ Robert Arboleda (SP), 48′ Luiz Gustavo (SP), 57′ Alan Franco (SP), 85 Muricio Pereyra (N)
Partido de vuelta: el jueves 22 a las 19:00 horas en el estadio Morumbí de San Pablo.
