Cerro de atrás, apostando todas sus fichas a la cabeza. Y fue pleno con los cabezazos de Pablo Lacoste –por partida doble del mejor de la cancha-, y de Nicolás González.

El albiceleste, se mostró sólido, compacto y con un Tabaré Viudez convirtiéndose en el conductor del equipo y tornándose decisivo en los remates de pelota quieta, arma que resultó letal. Sobre todo en la primera mitad, para dar vuelta el marcador y revertir la desventaja –gol de Matías Alonso-, con la potencia y el oportunismo de Pablo Lacoste. En el complemento, el local manejó el trámite y con el tanto de Nicolás González, le bajó la cortina al partido.

Cerro en la pelea por el ascenso.