Un punto, puro lamento en ambos bandos. El empate no fue del agrado de Racing, que por primera vez salió de zona de ascenso directo y tampoco en filas de Central Español, que se alejó de la franja de clasificación a los play-offs.

Lo que si hay que subrayar, es que metieron y dejaron todo en la cancha. Muy buen partido de fútbol, de trámite entretenido y por demás agradable, de permanente ida y vuelta, con arqueros convertidos en protagonistas, sobre todo el cervecero Lucero Alvarez.

Los goles en la primera parte: abrió la cuenta Agustín Miranda, con un preciso cabezazo para el palermitano y a los pocos minutos Maicol Ferreira, con un disparo rasante, volvió a poner tablas en el tanteador.

En el complemento, mejor arranque del equipo de  Mario Slzafmyc que no logró plasmar la superioridad demostrada en el juego en la red, exclusivamente por culpa de Lucero Alvarez.   

Igualdad con indudable sabor agridulce.