¿Son fantasmas?
Cuando Víctor Hugo Morales decidió seguir al Defensor 1976, estaba realizando una justicia deportiva merecida no acostumbrada, pero si era de estricta justicia y coherencia DE ESE MOMENTO.
Soy entrenador de fútbol y estoy escribiendo. No soy periodista. Pero al igual que cuando dirijo no me fijo nada más que en no traicionar mi idea, a mis jugadores, a mi club de ese momento y a sus fieles seguidores; no dejando que nada perturbe lo que creo que es lo mejor, solo miro hacer bien mi tarea y que de beneficios a los antes mencionados. A veces sale bien otras no, pero ser coherente con mi función. Entonces estoy escribiendo lo que siento.
Los equipos “chicos” siempre han tenido una lucha desigual a todo nivel. En la A.U.F, en las canchas, en la repercusión de lo que hacen. Los grandes han tenido lo que siempre han merecido y merecen porque son dos columnas de gloria para nuestro país.
Desde ese quiebre histórico del equipo de Franzini y el “Profe” de León del 76 tanto Defensor (en ese momento) como Danubio (otro equipo con “cantera de jóvenes”) comenzaron a “exportar” jugadores al extranjero sin pasar por los “grandes” de Uruguay, siguiendo sus pasos “los otros chicos”. Este hecho fue mermando el poderío de albos y aurinegros comenzando a “crecer” deportivamente los “en desarrollo”. Esa merma de abastecimiento hizo decaer a los “grandes”; sobre todo en lo internacional y en lo local se entró a equilibrar lo deportivo entre “chicos y grandes”.
No ha sido así el “eco” de todo lo bueno y contra todo lo que luchan los clubes menores en su repercusión pública.
Una “monstruosa” cobertura en todos los medios hubo del clásico; antes, durante y después; quizás de las más grandes que he visto, hasta acaparando en su totalidad muchos programas; omitiendo en algunos casos informaciones de “otros protagonistas del fútbol uruguayo”. Es muy claro que nuestro fútbol está edificado y mucho le debemos a los equipos “grandes” que han bañado de gloria al Uruguay siendo digno de reconocer y agradecer.
Hoy; EN ESTE MOMENTO del campeonato Clausura; pasaron casi desapercibidos los que en realidad van primeros y segundos en este torneo. Con una apreciable ventaja del primero al tercero de 5 puntos y al cuarto de 6. Y en la Tabla Anual Defensor Sporting no da tregua en su liderato.
La maravillosa campaña de Defensor Sporting y River Plate no pueden estar ajenas a quien escribe esto; dándoles mi reconocimiento y este espacio donde puedo decir con propiedad que siento lo que sentirán tanto Tabaré Silva como Guillermo Almada. Ellos son de la “camada nueva” de entrenadores y deben seguir su “ruta” también siendo fieles a sus ideas, a sus jugadores, a sus clubes y a sus seguidores sin importar el “eco” de sus meritos. Y quizás esperando que alguna vez se reditúe la cobertura de Víctor Hugo del que “quebró la historia” en 1976.
Al no ser nombrados Silva y Almada como merecen y no verse como merecen Defensor Sporting y River Plate………..¿son fantasmas?.