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Dos idiomas diferentes





20 junio, 2015
Columnistas

Esta nota está AJENA a cualquier RESULTADO, pero si va directo al pensamiento anterior o durante un partido;  de dos mundos diferentes.

Cuando me llamaron para escribir como entrenador y no como periodista, ya que no lo soy, fue para tener una voz diferente y por supuesto todo lo que ello implica; acción, desarrollo, punto de vista, ni mejor ni peor; solo diferente, que a veces puede coincidir y muchas veces no.

Maxi Pereira, capitán hoy de la Selección, y el paraguayo Haedo Valdéz.

Maxi Pereira, capitán hoy de la Selección, y el paraguayo Haedo Valdéz. 

“Perdiendo con Paraguay por un gol, clasificamos igual”. Fueron algunos comentarios posterior al partido de Ecuador-México, a la luz del resultado que dio ganador a los del pacifico, realizados por prensa uruguaya.

Cambiaba de canal y se decía lo mismo. Puse la radio y…..”La misma milonga”.

Como todo en la vida, únicamente que se sea radical, es de un porcentaje. No todos los periodistas, no todos los jugadores, no todos los entrenadores, no todos los árbitros, no todos los dirigentes. En todo lo que se expresa debería ser así; por eso es siempre es bueno aclararlo.

Ese sentimiento de “cobardía deportiva”, aunque sea una realidad lo de perder y clasificar, “dentro de un vestuario” es algo que se “repele” con energía y no existe. Sabemos que “afuera” es algo que no se puede dominar desde “adentro”. Por eso la famosa frase del gran Obdulio Varela antes de entrar al partido final de la Copa del mundo 1950 y luego que “alguien” les dijera a los futbolistas….” Si nos hacen 4 estamos cumplidos”; a lo que se le dijo; “cumplidos solo si somos campeones” y seguido por la famosa sentencia;  “los de afuera son de palo” dijo el gran capitán en respuesta dirigida a sus compañeros. Porque si ese pensamiento pasa a ser un sentimiento posteriormente; “invade” a los protagonistas; y  “somos boleta”.

El pensamiento “dentro” es siempre positivo y es a ganador, jamás se debe pensar antes de entrar a la cancha………”que si perdemos, ….tal cosa”, es algo totalmente opuesto a una mentalidad ganadora.

Esos “miedos exteriores”, son imposibles de ser manejados, anterior a una confrontación futbolística, por eso el “aislamiento” de los protagonistas, como ÚNICA  medida precautoria.

¿Porque ocurrirá eso, en el ambiente que además “contagia” a los “escuchas o televidentes?”

Con ese pensamiento; ¿como hubieran actuado en la final mundial de 1930 entre Uruguay y Argentina; los jugadores nuestros  y su entrenador Alberto Supicci? ; cuando luego de ir ganando  se termina el primer tiempo perdiendo 2 a 1. ¿No se deberían haber presentado al segundo tiempo?

En 1950 cuando a los 6´ del segundo tiempo, los celestes  y con 200 mil personas festejando el gol de Brasil se pasa a perder la final del mundo 0 a 1. ¿Se tendrían que haber retirado del campo?

Peñarol en 1966 en Santiago de Chile, en la final de la Libertadores con River Plate argentino, iba perdiendo 2 a 0. ¿Ese resultado debería haber marcado el final del partido para jugadores y entrenador (Maspoli)?  y ¿tendrían que haber bajado los brazos?”

Cuando Nacional en 1971 debía jugar la final de América con Estudiantes de la Plata; y como estos eran monarcas reiterados del continente y su máximo exponente futbolístico de la época; ¿no deberían haber jugado; porque los platenses eran los campeones anteriores?

¿Cuántas historias podemos contar? Cientos de historias de éxitos uruguayos que tenían “todo en contra” y con opiniones negativas antes del comienzo o durante.

Pero siempre hay algo que no “invade” al vestuario; y es el coraje, la confianza que no hay en otras “tiendas”; pero siempre volviendo a lo del principio; no todos, pero si comentarios reales que son escuchados; no hay dudas y son verídicos, esos comentarios.

A veces hay muchas quejas de porqué desde “adentro” viene el…….. “a puertas cerradas”; o “no hay declaraciones” y tantas otras razones que intentan “aislar” de pensamientos negativos a la “interna”.

O también los otros que intentan minimizar esas medidas precautorias, y entonces se dice del otro lado;  “¡¡esto es un juego!!”, o “¡¡el futbol es para   disfrutar!!”.

Eso porque no tienes el peso de un país y su historia detrás. O los que dicen eso en sus trabajos particulares ¿no son exigentes con compañeros o con los de la competencia porque quieren que “salga lo mejor posible” una trasmisión, un escrito, o un comentario? Y eso está muy bien. Entonces si sos exigente y reservado para lo tuyo (porque si se tiene una primicia no se la comentas a otro sino que se deja para decirla uno mismo);  que no moleste que se sea exigente y reservado con el trabajo de otro, y que además “da vida”.

El ser positivo, está en la esencia del futbolista, el entrenador y el PF. El pensamiento de derrota, es “como cruzarse con un gato negro” (por dar un ejemplo futbolero). Uno no lo quiere, lo ahuyenta, no está.

El ser previsor es otra cosa.

¿Cómo se puede hablar de perder antes de un partido?

Es algo que esta tan lejos de la mente de los protagonistas, que quizás parezca muy distante de la comprensión en la lectura de esta  nota.

Así como no comparto que se hable de “perder” antes de jugar, acepto que en el juego democrático de la opinión no se esté de acuerdo con el pensamiento y acción de “adentro de un vestuario”.

Son difíciles de entender porque son 2 idiomas y “sentimientos” diferentes.