Tajos y apósitos
Los apósitos en el rostro de Ligüera.
Apósitos: Martín Ligüera ya empezó el partido con un pequeño apósito en la frente sobre una ceja, pero hubo que atenderlo y ponerle otros en el mentón y en un labio cuando en una incidencia en media cancha resultó nuevamente cortado.
Los apósitos en el rostro de Ligüera.
Miramar con camisa misionera: Los visitante lucieron la vieja camiseta del Misiones, uno de los clubes que se fusionaron para crear el actual, roja y negra a bastones verticales.
Pelota a la rambla: Entre el Cerro y el puerto, la bahía era un arco tentador. Fénix la sacó del estadio en el primer tiempo y esa pelota fue a dar a la rambla costanera. No volvió, al menos durante el primer tiempo, y varias reanudaciones se demoraron porque escasearon pelotas de reposición.
Ligüera titular: Fue el segundo partido del torneo en que ingresó de titular el 10 de Fénix.
Platea llena: Los albivioletas están llenando su platea en el estadio Capurro. La notable campaña del cuadro y el buen tiempo se confabularon para no dejar huecos en las graderías locales.
Centro Atlético: En un lapsus fallido un relator se equivocó y dijo “Club Atlético Fénix”. Un hincha en el palco lo corrigió: “Centro Atlético”, tal es el nombre de Fénix, Centro Atlético Fénix.
Los Pandiani: Fue el primer partido de Water Pandiani y su hijo Jorge Nicolás Pandiani (en la planilla de Miramar Misiones figuró como Jorge) con la camiseta de Misiones. En varias oportunidades se habilitaron mutuamente Pandiani a Pandiani.
Duelo Berbia-Pérez: En el segundo tiempo Adrián Berbia le atajó tres disparos seguidos, muy bien dirigidos y potentes a Maximiliano Pérez. En el duelo particular entre ellos, salió ganando el cebrita misionero.
Jorge Nicolás y Walter Pandiani.
