La AUF no tiene facultades de contralor electoral por lo tanto no puede intervenir en Cerro
En las actuales condiciones estatutarias, la AUF no posee facultades para ejercer como órgano de contralor electoral de sus clubes afiliados. El Estatuto tampoco otorga potestades para intervenir en las instituciones.
El Consejo Ejecutivo de la AUF simplemente se limita a recibir una nota oficial del club firmada por el presidente y el secretario general en funciones, quienes comunican que a partir de determinada fecha asumirán nuevas autoridades.
Inclusive, los clubes no informan siquiera sobre sus procesos electorales ni tampoco sobre el resultado de los mismos. El procedimiento es muy simple y consiste en comunicar los nombres de la nueva Comisión Directiva previo a su asunción y de la conformación de la plancha de tres delegados ante la AUF.
Sin embargo, en el proyecto de Estatuto que promueve la FIFA y en el que se trabaja desde hace meses, está previsto que la AUF tenga facultades para observar el proceso electoral de sus clubes, y de fiscalizar que sus autoridades sean constituidas de acuerdo al Estatuto vigente de cada institución. El concepto es general y baja en cascada desde la FIFA a los clubes: la FIFA controla a las Confederaciones, éstas a las asociaciones y federaciones, y estas últimas a sus instituciones afiliadas.
La FIFA le exige a las confederaciones un examen de idoneidad e integridad de sus candidatos a presidente; al tiempo que las confederaciones harán lo mismo con las asociaciones y federaciones, para que estas realicen el mismo examen de integridad e idoneidad de sus candidatos a presidente. Todo ello porque los presidentes de las confederaciones serán integrantes del Consejo de la FIFA y los presidentes de las asociaciones y federaciones, serán a su vez integrantes de los Consejos de las confederaciones, y eventualmente del Consejo de la FIFA, como lo es Wilmar Valdez.
El nuevo Estatuto de la AUF obligará a que las instituciones también adecuen los suyos y realicen ese examen de integridad e idoneidad de sus candidatos.
