¿Qué queres?, ¿que no lleven uruguayos?
Pablo Repetto, DT de Olimpia en el GPC.
El club Olimpia de Asunción-Paraguay comienza una nueva temporada.
No es un club uruguayo dirán ustedes; y tienen toda la razón. Pero hay un “lazo” dentro de la historia del club que lo liga con Uruguay.
Tener éxito y memoria de ese éxito; es una buena señal.
Tener éxito y olvidar su origen es ser desagradecido.
En el rubro entrenadores; el “El rey de copas” (como es conocido también en Paraguay) siempre ha sido un agradecido a los entrenadores uruguayos y estos le devolvieron ese reconocimiento con triunfos desde principios de la década de 1970.
Luis Cubilla.
Aunque en la memoria generalizada de todos nosotros esta el nombre del gran Luis Cubilla como la piedra angular en la cadena de conductores celestes en ese club; el que inició ese camino de éxito, fue nuestro compatriota José María “Chema” Rodríguez en el año 1971.
Cubilla fue determinante en esa confianza en los DT celestes.
Haremos un recorrido donde es extraordinario el éxito de los entrenadores uruguayos.
El querido José María “Chema” Rodríguez abrió el camino de conquistas de campeonatos paraguayos con Olimpia, en 1971 y luego se sumaron Luis Cubilla (1979), José Sacìa (1980), Roque Fernández (1981), nuevamente Luis Cubilla (1982), y Sergio Markarian (1983) conquista el quinquenio de entrenadores uruguayos, de principios de los 80.
En 1979 se da una situación con dos uruguayos y hermanos. Además del título local se consigue la Libertadores de América (Luis Cubilla); la Copa mundial (Intercontinental) con una particularidad. El régimen antiguo de dicha Copa (Campeón de América vs. Campeón de Europa) hacia que se jugara un partido en un continente y otro en el otro; donde una final era en un año (1979) y la otra unos meses después, al siguiente (1980). Luis Cubilla dirige y gana su final jugada en Paraguay (y se marcha poco tiempo después a dirigir Newell´s Old Boys de Argentina) y su hermano Pedro Cubilla toma el mando de los olimpistas y gana la otra final en 1980 en Suecia al Malmo F.F, coronando al equipo paraguayo como mejor del mundo. Luego juega la Copa Inter americana con el Fas de El Salvador (campeón centro americano), y se corona como campeón, siguiendo Pedro en la dirección técnica y ganando otro lauro internacional.
Es decir que sumamos a Pedro Cubilla a los podios máximos conquistados por Olimpia.
Vuelve otro charrúa en 1985 al mando, con Aníbal “Maño” Ruiz, retomando el cetro máximo para los uruguayos.
Luis Cubilla en 1988 y 1989 se pone, nuevamente, la corona de mejor de Paraguay con los franjeados.
Hace, Luis, un alto en los torneos internos al año siguiente, pero lleva a lo máximo como campeones de América (1990) al conjunto guaraní; ganando en lo internacional ese año además la Súper Copa Sudamericana, Recopa y la Copa Nerhu.
Luis Cubilla se transforma en leyenda.
En el año 1993 otro uruguayo se suma a la larga lista de entrenadores charrúas que conquistaron títulos con Olimpia; Ever Almeida había “colgado” los guantes y pasa a ser entrenador, llevando a su Olimpia al podio mayor paraguayo.
En 1995 retoma el cetro numero 1 Luis Cubilla ganándolo, y le agrega 1997, 1998 y 1999 (este último con una particularidad) con el máximo lauro de aquellas tierras.
Cubilla deja Olimpia, ese año 99, al principio, y el Torneo Apertura lo dirige un hijo prodigo del club guaraní, el uruguayo Miguel Ángel “Puchero” Piazza (autor en 1979 de un gol en el 2-0 de la primer final en Asunción, la segunda fue 0-0 en la propia Bombonera con Boca Juniors) y lo lleva al título de campeón, retornando Cubilla para el resto del torneo saliendo campeón paraguayo el laureado entrenador oriental.
En el año 2003 Cubilla le agrega el último titulo con él al frente de Olimpia y gana la Recopa Sudamericana de ese año, en otro título internacional.
Se hicieron más parejos los campeonatos locales y Olimpia debe esperar.
En lo local deben pasar 11 años y 14 campeonatos para que Olimpia vuelva a ser campeón.
Pablo Repetto, DT de Olimpia en el GPC.
El entrenador uruguayo Gerardo Pelusso “rompe el hechizo” y levanta la Copa en el 2011, siendo el ultimo entrenador campeón con el equipo guaraní.
Ahora el laureado club paraguayo lleva al entrenador charrúa Pablo Repetto para intentar reverdecer aquellos laureles de triunfo.
Bien merecido y justa recompensa para un entrenador que ha dejado bien en alto el nombre de Uruguay con los años en Independiente del Valle de Ecuador, al que posicionó en el ámbito internacional. Club este que se empezó a codear con los mejores de América, gracias también al trabajo exitoso de nuestro compatriota.
Asumió un desafío donde el haber nacido en este país para ese club es de eterno agradecimiento de parte de ellos y de oportunidad para los nuestros.
Si hacemos un repaso de lo escrito, contamos que desde el año 1971 a 2011 (40 años) los entrenadores uruguayos le “devolvieron gentilezas” a los dirigentes paraguayos con 24 títulos y sus copas para engalanar las nutridas vitrinas olimpistas.
Ahora Pablo y su cuerpo técnico uruguayo con Oscar Quagliatta, como alterno; Roberto Texeira y Nicolás Penino como P.F; portaran también la bandera uruguaya.
Un club con memoria, agradecido, fiel y estratégico; para los uruguayos, que también dejaron en alto el nombre de nuestro país a lo largo de la historia del “Rey de Copas”.
